Por segunda campaña consecutiva, la afición de Logroño podrá disfrutar de la Liga Adecco Oro de la mano de un Knet Rioja que no renuncia a seguir creciendo. Liderados por el técnico Jesús Sala, el club espera dar un nuevo paso al frente a nivel deportivo y social en una campaña en la que no renuncian al sueño del playoff. Logroño quiere el mejor baloncesto y el Knet está dispuesto a dárselo.
PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Dice el refrán que cuando uno da todo lo que tiene no está obligado a más y, en el caso del Knet Rioja, poco más se le puede pedir a su junta directiva. En los últimos años, el plantel riojano se ha esforzado por crecer día a día y por hacerlo de la mejor manera posible completando un camino repleto de pequeños pasos y en el que cada uno ha sido más firme que el anterior.
Sin acometer locuras y sin poner en riesgo el proyecto, en Logroño lo tienen claro y saben que el trabajo diario será la clave para que Logroño alcance unas metas para las que no se marcan límites. Las primeras permanencias en la Adecco Plata, el año mágico del doblete, o el ascenso a la Adecco Oro quedarían en agua de borrajas si desde el club no se siguiese trabajando por y para el aficionado. La recuperación de la cantera en pleno centro de la ciudad, la salida de los jugadores a la calle para reclutar aficionados o la creación de un Torneo Internacional frente al Caja Laboral y el Armani Jeans han sido algunos de los últimos esfuerzos de un club que sigue trabajando para poder aumentar su masa social a golpe de “Cuento contigo”, el lema de su campaña de abonados.
Creciendo desde la humildad y el trabajo:
Una temporada más, y ya van 9, el técnico madrileño Jesús Sala será el inquilino de un banquillo al que llegó de manera provisional y en el que se ha asentado como el segundo técnico en activo más longevo de nuestro país superado tan sólo por Alejandro Martínez (CB Canarias). La ilusión del club por seguir creciendo es el veneno perfecto para seguir atrayendo a un Jesús Sala encantado con el equipo y la ciudad: “Lo más importante para mí como técnico es que cada año intentamos ir a mejor y superarnos con unos objetivos que motivan tanto al club como al aficionado y eso es algo que, en estos tiempos de crisis, no es fácil de encontrar. En el club tienen clara la línea de trabajo a seguir por lo que creo que mi apuesta de seguir aquí ha sido lo más acertado”.
Acostumbrado a tener que luchar con el presupuesto para sacar el mayor rendimiento posible de cada euro, Sala se puso manos a la obra para confeccionar la mejor plantilla posible para su nuevo asalto a la Adecco Oro: “Una vez concluida la temporada anterior y analizada la plantilla que teníamos, ofrecí al club una idea que llevaba cinco meses madurando: un equipo con gente joven y de calidad; gente que en una o dos temporadas pudieran dar un salto de categoría. La idea caló muy bien en el club y a partir de ahí comenzamos a configurar el equipo con la premisa de poder mantener el bloque nacional, algo que conseguimos con la renovación de David Mesa antes incluso de acabar la temporada, con Borja Arévalo que era una de mis prioridades y con Quique Suárez; tan sólo se nos escapó David Mediano que, por motivos personales, decidió regresar a su tierra. Pronto llegaron los primeros refuerzos adaptados a nuestro ideal de jóvenes de futuro y, finalmente, la guinda a nuestra plantilla con la búsqueda de rookies para nuestro juego interior que, aunque no fueran una realidad al 100%, estuvieran por desarrollarse aprovechándose de una liga tan exigente como la Adecco Oro”.
Con estas pautas, la dirección deportiva y el cuerpo técnico comenzaron el trabajo para configurar un plantel con diez fichas y que se ha convertido en uno de los primeros en mover a una de sus fichas con la sustitución de Eloy Vargas por un viejo conocido de la casa, un Sidao Santana que sería el encargado de dar por cerrada la plantilla.
La plantilla del Knet Rioja al completo:
Bases: Mikel Úriz y Borja Arévalo
Será complicado que la nueva pareja de bases pueda hacer olvidar a un Matt Witt que el pasado curso liderara al equipo con su juego pero tanto Úriz como Arévalo quieren demostrar que están sobradamente preparados para ello.
La revaloración del base norteamericano en el mercado y su posterior salida del club rumbo al Budivelnyk de Ucrania, llevó a Jesús Sala a otorgar una mayor importancia a la presencia del joven Borja Arévalo en el equipo, una de sus grandes apuestas en los últimos años y a quien acompañaría de uno de los mejores bases nacionales de los dos últimos cursos, el codiciado Mikel Úriz: “A la hora de plantearnos el base a fichar manejábamos una lista de tres nombres, todos ellos jugadores jóvenes que venían de hacerlo bien en sus equipos. Poco podía sospechar entonces que Mikel Úriz, el que creía más complicado de fichar, terminaría por convertirse en el más dispuesto a recalar en el club. Su llegada tiene que servir para obtener las mejores cualidades que obteníamos de un jugador como Witt mejorando incluso su anotación y el estilo de juego que ahora será más rápido. Tenía claro que era la pareja idónea para Borja ya que por sus características pueden complementarse muy bien”.
Aleros: Niko Rakocevic, Quique Suárez, Alberto Ruiz de Galarreta y Joan Tomás
Dos y dos será el balance de una línea exterior en la que repetirán dos hombres respecto al pasado curso y a la que se incorporarán otros dos. Quique Suárez y Alberto Ruiz de Galarreta fueron los elegidos para formar parte del bloque nacional, dos hombres con un gran conocimiento tanto del club como de la categoría: “En el caso de Galarreta no nos lo pensamos mucho, hizo una gran recta final de la temporada estando al nivel de los mejores jugadores por lo que teníamos claro que podía ser uno de los hombres que más nos aportase este año. Acto seguido, comenzamos a trabajar en la renovación de Quique Suárez, un jugador que tiene mucho carácter y que aporta mucho saliendo del banquillo a modo de abrelatas en los momentos más difíciles”.
Atadas las dos renovaciones era momento de lanzarse al mercado para completar el perímetro y la llegada de Niko Rakocevic serviría a Sala para aportar algo más que garantías exteriores: “En el caso de teníamos claro que era uno de los hombres por los que pujar ya que creo que era de los mejores tiradores que había el año pasado en nuestra competición. Además de eso, estamos ante un jugador que debido a su pasado como base tiene suficiente manejo de balón para poder ayudar en esa posición si tuviéramos una lesión en el puesto de base”.
Joan Tomás sería el elegido para completar una línea con la que el técnico se siente satisfecho: ”Nuestro siguiente movimientos tendrían que llegar al sondear el mercado a la búsqueda de un jugador grande y que fuera buen tirador aunque en este caso tardamos muy poco en tener sobre la mesa el nombre de Joan Tomás, un jugador que conozco de las categorías inferiores de la selección, que me gusta y al que le tengo mucho cariño por lo que me pareció una apuesta muy interesante ya que tiene muchísimo potencial por desarrollar. Es un alero de más de dos metros, con buen físico, técnicamente bastante mejor de lo que puede parecer para su tamaño y con la necesidad de encontrar un sitio para desarrollarse al 100%. Se le va a pedir un trabajo físico, la defensa de exteriores grandes y ayuda en el rebote”.
Pívots: Alex Serna, David Mesa, Juan Herrero, Marek Mejeris y Sidao de Santana
Para poder reforzar el juego interior, Sala tenía claro qué había fallado con anterioridad así como las claves para solucionar los problemas: “Esta temporada tendré la suerte de tener 5-6 jugadores interiores lo que nos hará ganar en profundidad. El año pasado lo pasamos muy mal al perder a David Mesa muy pronto por lesión estando perdidos en el juego interior, especialmente con las rotaciones en el puesto de 4 ya que teníamos muchos jugadores atléticos, rápidos, y que reboteaban pero teníamos diferencias entre ellos a nivel físico careciendo de potencia”.
Precisamente David Mesa fue el primer nombre en unirse a una plantilla que vio como el jugador interior tuvo que esperar unos días para incorporarse a los entrenamientos a la espera de la llegada del alta médica: “Ha sido uno de nuestros fichajes más importantes ya que el año pasado las lesiones y molestias le impidieron jugar al 100%; se lesionó en la primera jornada y aguantó todo lo posible para ayudar al equipo lo que habla por sí solo acerca de su nivel de compromiso. Necesita coger aún el ritmo de competición pero stamos seguros de que nos aportará muchas cosas. Junto a él, seguirá en el equipo Mareks Mejeris, una de las apuestas del debut en la Adecco Oro, un hombre que fue creciendo y que este verano ha seguido jugando a muy buen nivel con su Selección; lleva apenas cuatro días entrenando con el equipo en los que ha demostrado estar a muy buen nivel. La tercera renovación es la de Juan Herrero, un jugador que conoce bien la casa y que nos aporta mucho tanto en los entrenamientos como en los encuentros”.
La potencia y la intimidación llegará procedente de México con Álex Serna, un polivalente jugador que aportará físico a la rotación interior: “Una de las cosas que más echamos de menos el año pasado fue la presencia de un jugador potente. Serna tiene mucha musculatura, es un jugador de 115 kilos, con una capacidad atlética impresionante y cuyo juego se basa mucho en correr y en rebotear en ataque. Nos aporta el nivel defensivo que queríamos y una capacidad atlética bastante grande”.
Pese a que la rotación interior debiera cerrarse en un principio con la llegada de Eloy Vargas, el club riojano, cansado de esperar, decidió mover ficha incorporando a la pintura a un viejo conocido, el pívot Sidao Santana: “La llegada de Vargas se retrasaba cada vez más y eso nos restó confianza en el jugador; Sidao llevaba días ejercitándose con nosotros para mantenerse en forma y su evolución y mejora crecía día a día ayudando mucho al equipo; tiene el hándicap que solo ha jugado tres meses de los últimos 19 pero creemos que su incorporación fue lo más acertado. Tras su lesión volvió a las canchas en Angola donde se proclamó campeón de Liga adquiriendo de nuevo el ritmo de competición”.
Un estilo de juego que perdurará en el tiempo
El técnico madrileño tiene muy claro lo que quiere de sus hombres, un estilo de juego basado en los éxitos del pasado curso y reforzado con pequeños detalles que ayuden a dar un salto de calidad: “Sobre el papel siempre tienes claro el estilo de juego de quieres lograr, a partir de ahí tienes que darlo todo para tratar de conseguirlo. A nivel de ritmo y conceptos vamos a tratar de jugar lo más parecido posible al estilo del año pasado. Vamos a intentar correr siempre tratando de anotar siendo más agresivos a nivel ofensivo. Queremos ir a partidos con anotaciones altas. ¿Qué cambia? Cambia el tener un base que en vez de asumir el protagonismo que pudiera tener Witt puede ofrecer más al equipo repartiendo juego ya que no esperamos tener que ningún jugador que anote mucho sino a un equipo en el que 8 o 9 jugadores tuvieran cada uno 10 puntos convirtiéndonos en un equipo mucho más difícil defender. La clave estará en saber si somos capaces de buscar las mejores opciones entre las defensas rivales”.