Con una Copa Príncipe y cuatro ascensos en sus vitrinas Urko Otegui es uno de los grandes dominadores de la competición a la hora de afrontar una final. Su experiencia en la competición será clave a la hora de liderar a un equipo en el que se diera sus primeros pasos como jugador y al que puede entregar ahora su primer título en la Adecco Oro.
PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
El regreso de Urko Otegui al Quesos Cerrato la pasada campaña suponía una vuelta a casa, la de un jugador que diera sus primeros pasos como profesional en un Marta Domínguez al que volvería para agasajar a su afición con el MVP Nacional.
Apenas unos meses después, Urko se ha convertido en el líder estadístico de un equipo con el que quiere repetir el título de Campeón de Copa Príncipe logrado en 2007 con Baloncesto León en una final que es todo un premio para su equipo: “Esta Copa es un motivo más para estar orgullosos y satisfechos con el trabajo que hemos realizado durante una primera vuelta en la que hemos sido la mejor defensa del campeonato. El haber perdido únicamente tres partidos significa mucho para nosotros y habla muy bien del trabajo de un grupo unido y plagado de gente con mentalidad ganadora que no da un partido por perdido. Hemos formado un grupo muy valioso que se ha ganado el poder estar esta final y que se partirá la cara para poder ganarla”.
Precisamente el vestuario es una de las claves del buen funcionamiento de un equipo que ha hecho del Marta Domínguez su hogar: “La gran mayoría nos conocemos ya del año pasado y eso hace que el vestuario se gestione muy bien; además, los nuevos fichajes se han integrado a la perfección ayudándonos a crear un buen ambiente en el día a día que se traslada a la cancha haciéndolo todo mucho más sencillo”.
Será precisamente sobre la cancha donde encontremos uno de los principales atractivos de una final que enfrentará a los dos MVP nacionales de la competición con un duelo Otegui-Trías que hará las delicias de los aficionados: “Siempre he dicho que el jugador nacional tiene un peso muy importante en esta categoría y esto se está poniendo de manifiesto esta temporada. Los jugadores españoles lo estamos haciendo muy bien y los equipos comienzan a valorarlo por eso creo que más de una final entre dos MVP esta es una final entre dos colectivos plagados de jugadores españoles que ponen en alza el producto nacional”.
Pero este será tan sólo uno de los puntos a tener en cuenta en una igualada final y en la que Urko tiene claro por dónde debe caminar su equipo si quiere hacerse con el triunfo: “Las finales suelen ser partidos muy diferentes a los de liga regular ya que hay mucho más nerviosismo y mucha ansiedad, por eso nosotros tenemos que ser capaces de controlar estos factores sabiendo que si explotamos nuestras armas tendremos nuestras opciones”.
La experiencia de una Copa Príncipe y cuatro ascensos serán una de las armas de Otegui a la hora de asesorar a un vestuario sobrado de experiencia pero en el que varios jugadores afrontarán su primera final: “El consejo será para ellos pero también para mí y no es otro que el jugar tranquilos teniendo muy claras aquellas cosas que vamos a preparar para tratar de sorprenderles. Tenemos que afrontar el encuentro como uno más, controlando las emociones y sin tratar de ganarlo en el minuto uno ni de darlo por perdido si ellos consiguen alguna renta de puntos en algún momento del partido. Hay que ser conscientes de que la final dura 40 minutos y de que no termina hasta que no suena el bocinazo final”.
Será en ese momento cuando conozcamos el equipo que grabará su nombre en un título que Urko Otegui desea llevar a Palencia con el único objetivo de poder ofrecérselo a una afición entregada: “El club se merecería esta Copa porque cada año se da un nuevo paso al frente. Aquí se trata muy bien al jugador, respetándolo y cuidándolo cada día y eso ayuda a que nuestro compromiso con el equipo sea aún mayor dando el máximo en cada entrenamiento y en cada partido. Además, tenemos una masa social que crece en cada partido y que no nos deja solos en ningún partido por lo que ellos se merecen más que nadie una Copa que sería un gran reconocimiento a su labor”.