A sus 35 años, el ala-pívot del Ford Burgos se ha convertido en pieza indispensable dentro de un equipo junto al que peleará para poder conquistar su tercera Copa Príncipe. Jorge García conoce mejor que nadie las claves para hacerse con un título que será “el mejor premio para la afición burgalesa”.
PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Llegó al Ford Burgos como uno de los hombres con más experiencia de la categoría y, en apenas cinco meses, se ha convertido en uno de los pilares básicos de un equipo en el que su titularidad es indiscutible. A punto de cumplir 36 años, la ilusión de Jorge García por la Copa Príncipe se mantiene tan intacta como hace 8 temporadas cuando conquistara con Baloncesto Fuenlabrada (2005) un trofeo que levantaría nuevamente con Lucentum Alicante (2009).
La siempre fría estadística nos desvela que Jorge García levanta el título copero cada 4 temporadas, un ciclo que se repetiría en 2013 siempre y cuando los burgaleses sean capaces de anular a un River Andorra al que el center cordobés califica como un gran grupo: “Cuentan con un equipo muy experimentado y que se ha quitado una parte de presión al jugar como visitante; han rendido a un gran nivel durante la primera vuelta y por eso no tienen nada que perder, lo que hace de ellos un rival mucho más peligroso de lo que ya son de por sí. Sí queremos hacerles frente tendremos que mantener la concentración durante los 40 minutos y ser sabedores de que esta oportunidad es única para una ciudad como Burgos y para un equipo como el Autocid”.
Precisamente la organización de la cita copera supone alcanzar un objetivo perseguido durante las últimas temporadas y que parecía realmente lejano al principio de una temporada en la que las lesiones terminaron por unir a un equipo que ha ido de menos a más: “Comenzamos con una pretemporada difícil con varias lesiones que lastraron nuestra preparación, eso nos unió mucho como equipo forzando que cada uno diésemos el 120% para poder sacar adelante nuestros partidos. En las últimas semanas se han ido incorporando los lesionados y parece que para la final de Copa podremos estar todos por lo que el equipo estará unido para luchar por nuestro primer gran objetivo con un buen nivel de baloncesto”.
Y es que el simple hecho de disputar la final supone ya un premio para un Ford Burgos que ha crecido como equipo con el paso de las semanas apoyados por el apoyo incondicional de una afición con la que el equipo se siente en deuda: “Esta Copa Príncipe ha sido ya un premio para los jugadores, todo un reconocimiento a nuestra primera vuelta y al gran trabajo que hemos desarrollado como equipo pero ahora queremos dar un paso más y tratar de conseguir el título para dedicárselo a nuestra afición. Ellos son los verdaderos protagonistas del día a día y los que están detrás de nuestro trabajo empujándonos para que lleguemos lejos. El Plantío está acostumbrado a disfrutar con el mejor baloncesto y esta final no será una excepción”.
El ala-pívot cordobés será sin duda una de las piezas más importantes de una final para la que cuenta con la receta perfecta: “Tenemos que intentar ser fuertes y mantener nuestra esencia, somos un equipo que construye su juego a través de la defensa y esa tiene que ser nuestra mayor preocupación. Ellos jugarán sus bazas durante el partido pero durante la temporada hemos demostrado que somos ambiciosos y que la combinación de juventud y veteranía de nuestra plantilla nos puede llevar muy lejos si imponemos nuestro ritmo”.