La perla de la Selección Española lidera a una generación que desata pasiones en Europa con un juego que enamora.
PABLO ROMERO / DPTO. COMUNICACIÓN FEB
Amanece un nuevo día en Bilbao, es domingo y por tanto jornada de descanso para los diferentes equipos participantes en el Europeo U20; pero no para la Selección Española. Pese haber finalizado la primera fase con tres victorias en otros tantos encuentros, los pupilos de Juan Orenga madrugan para acudir a su habitual cita con el Bilbao Arena donde se ejercitarían durante cerca de hora y media antes de gozar de una merecida tarde libre.
Las sensaciones son positivas, más aún después de la última victoria ante Austria por 73 puntos y donde nuestra Selección se mostró infalible tanto en ataque como en defensa (47-120); pese a ello, las jóvenes promesas del baloncesto nacional no quieren confianzas innecesarias y la frase más repetida durante la sesión preparatoria es aquella que reza que "debemos ir partido a partido".
Un fiel reflejo de la madurez de este grupo lo encontramos en Nikola Mirotic, el máximo anotador del torneo en su primera fase (25 p.p.g.) llega sonriente a la cancha, con ganas de bromear junto a sus compañeros pero con las ideas muy claras, ya que para él, el mérito no es de un sólo hombre, es trabajo de doce: "Personalmente me estoy sintiendo muy bien sobre la cancha, estoy muy contento de poder jugar con estos compañeros y en especial con Josep Franch -máximo asistente- con quien me siento muy cómodo, pero realmente no importa quién anote más o menos puntos, la clave está en que estamos jugando como un equipo y para eso no podemos relajarnos ninguno".
Pero... ¿cómo se encuentra la plantilla después de mantenerse invicta en esta primera fase? El ala-pívot nacional nos realiza una radiografía del vestuario: "El equipo está muy motivado, somos conscientes de que estamos haciendo un gran trabajo pero también sabemos que hay detalles que debemos pulir. Estos primeros partidos nos dejan muy buenas sensaciones pero no debemos relajarnos porque en la segunda fase los rivales nos van a poner las cosas muy difíciles. Vamos a aprovechar la jornada de descanso para trabajar sobre nuestros fallos y tratar de ser aún más competitivos en el próximo encuentro".
Cuestionado sobre las posibilidades de España para estar en el podio, Mirotic es cauto y basa sus esperanzas de medalla en afrontar con humildad y respeto cada uno de los encuentros venideros: "Es cierto que esta Selección es capaz de ganar el campeonato pero no llegaremos hasta el final si no somos capaces de ir partido a partido; tenemos que estar preparados para mantener la concentración tanto en ataque como en defensa durante los 40 minutos como hemos demostrado durante estos días".
El jugador interior quiere poner por tanto con una medalla el broche de oro a un año mágico para él tras su paso por el Palencia Baloncesto de la Adecco Oro, una etapa que recuerda con gran cariño y que no olvida en sus palabras: "La Adecco Oro fue una liga realmente importante para mí a la hora de ganar experiencia; tuve la suerte de encontrarme con un gran técnico como Natxo Lezkano que me ayudó bastante y me enseñó muchas cosas. Desde el principio me sorprendió por ser una liga muy fuerte y con un gran nivel donde un jugador joven puede mejorar mucho para llegar a la ACB mucho más maduro".
Con el final de la sesión de entrenamiento, España da comienzo a unas horas de descanso en las que una sola idea flotará en la mente de los jugadores: saldar con victoria el próximo encuentro. Y es que, en la Selección Española, el futuro está en buenas manos...