Toni Vicens: decálogo de manías, rarezas y supersticiones de un MVP nacional
11/19/2010 - 3:07 PM
Toni Vicens, ala-pívot del Básquet Mallorca y MVP Nacional de la última jornada, nos desvela las claves de su éxito : la elaboración de todo un ritual con el que llama a la suerte antes de cada partido y que nació hace dos veranos en una concentración de la Selección Española U-19.
PABLO ROMERO / DPTO. COMUNICACIÓN FEB
En su nueva etapa en la Adecco Plata, Básquet Mallorca ha apostado por un equipo plagado de jugadores jóvenes y de la tierra. Entre ellos, un Toni Vicens que a sus 20 años (27/03/1990) regresa a casa tras haberse formado como jugador en la cantera de Estudiantes y haber militado en Sabadell y Vigo. Con un juego que va in crescendo desde la primera semana de competición, Toni se proclamó MVP Nacional de la última jornada intersemanal con 31 tantos de valoración y siendo superado tan sólo por el +38 de Sidnei de Santana. Pero... ¿cuál es su secreto?
Además del habitual trabajo semanal, el interior cuenta con todo un ritual de creencias y supersticiones con las que ha creado una rutina que comienza unas horas antes del comienzo del partido. La iniciativa se inspiró en una recomendación de Antonio Pérez, actual entrenador de Leyma Básquet Natura Coruña (Adecco Plata), con quien compartió experiencias en categorías inferiores de la Selección Española de Baloncesto y quien le propuso la creación de una serie de hábitos para los días de partido: "Antonio me ayudó mucho durante la concentración del Mundial de 2008 recomendándome que me marcase unas rutinas y realizándolas siempre de igual manera para poder ser así un jugador constante. Lo probé por primera vez con la Sub-19 y me fue muy bien; al año siguiente en Vigo no tuve protagonismo en el equipo por lo que era un poco inútil llevarlo a cabo así que este año lo he recuperado y las cosas han vuelto a ir bien en la pista".
Este es el decálogo cronológico de manías, rarezas y supersticiones de un MVP nacional:
1) Pasta y carne componen su menú - Su dieta los días de partido es invariable, pasta y carne componen un menú que intenta no modificar cuando juega su equipo y que le ayuda a sentirse bien sobre la cancha: "Procuro comer siempre lo mismo; en los partidos de casa soy yo quien hace la comida y generalmente me gusta comer sólo y bebiendo zumo o agua. Cuando jugamos fuera no me queda de otra que adaptarme a las comidas que el equipo encarga en los hoteles aunque suelen incluir ya pasta y carne".
2) Último contacto con la red - Una vez finalizada la comida, y como paso previo a la siesta, el jugador toma como indispensable un último contacto con su entorno social conectándose por unos minutos a la red para charlar con amigos: "Nada más comer siempre me conecto unos 15-20 minutos a internet para ver el correo, echar un ojo al Facebook y hablar con los amigos por el Messenger".
3) La siesta, mínimo de hora y media - Prácticamente el 100% de los equipos del panorama nacional tiene instaurada la siesta como una de las normas para los días de partido. En el caso de nuestro protagonista, esta tiene que durar como mínimo una hora y media: "La siesta es una de las partes más importantes para mí los días de partido, procuro que dure una hora y media ya que me sirve para llegar descansado al encuentro".
4) Pero nada es más importante que una llamada a su madre - El último paso de Toni antes de salir de casa tiene que ver con su fan más fiel, su madre. Toni reconoce que le sería difícil jugar si antes del salto inicial no tuviese algún tipo de contacto telefónico con quien no se pierde ni uno sólo de sus partidos: "Hablar con mi madre es algo imprescindible, intento llamarla siempre de algún modo ya que me da suerte hablar con ella. Durante unos 5 minutos comentamos como ha ido el día y lo que espero del partido. Si algún día, por cualquier motivo, no podemos hablar, me suele mandar algún sms deseándome suerte. Es algo que hago desde mi etapa en Sabadell y que más que una manía es una tradición. También hay tiempo para mi padre, mis tíos, mis abuelos, pero con ellos suelo estar más bien después del partido".
5) Andando al pabellón concentrado con su música - Casi dos kilómetros separan la vivienda de Toni Vicens del Palau Municipal D´Esports, distancia que el jugador recorre a pie mientras comienza el proceso de concentración con su música favorita. "Siempre acudo al pabellón andando, tardo unos 20 minutos en los que voy escuchando música en mi Ipod donde retumban canciones con mucho ritmo. El estilo musical suele variar dependiendo del día y mi estado de ánimo pero habitualmente suelo escuchar música house o grupos como Extremoduro, Nach".
6) El más madrugador en llegar al pabellón...¡PARA DUCHARSE! - Pese a que el técnico Xavi Sastre no cita a sus hombres hasta hora y media antes del encuentro, Vicens es el primero en llegar a las instalaciones. El jugador balear acude con tanta antelación para darse una ducha antes del partido algo que justifica del siguiente modo: "La ducha es otro de mis rituales, suelo estar unos 10 minutos bajo el grifo ya que me ayuda a concentrarme tras la siesta para estar 100% enchufado al partido. A partir de este momento comienza lo serio".
7) Vendaje y calentamiento especial con pantalón de botones - Concluida la ducha es el turno del fisio donde se venda ambos tobillos antes de saltar a la cancha para realizar una serie de entrenamientos específicos. Mientras, sus compañeros comienzan a llegar al pabellón. Lo curioso del calentamiento es que el pívot siempre lo realiza con un pantalón de botones el cual no se quita hasta 5 minutos antes del encuentro.
8) Calcetines Nike negros - Y entre tanta manía y superstición, no podría faltar alguna relacionada con la vestimenta de partido: "Desde hace 3 años y siempre, absolutamente siempre, uso calcetines medianos de color negro y de la marca Nike. Tan sólo prescindo de ellos por obligación como cuando he ido con la Selección Española donde usamos los de nuestro patrocinador Li-Ning".
9) Siempre tres botes antes del tiro libre y lugar en el centro del banco - Las manías del pívot se extienden a la cancha una vez comenzado el encuentro confiesa que es un enfermo del marcador al que no deja de mirar en todo momento: "Antes de lanzar un tiro libre miro al aro y boto siempre tres veces el balón mientras pienso que no puedo fallar. Cuando estoy en el banco me gusta sentarme en el centro, alejado de las esquinas".
10) Tras el partido, llega el relax - Una vez acabado el partido, Toni aprovecha para reunirse sobre la cancha con aquellos familiares y amigos que han acudido a verlo y donde destaca la presencia de padres, tíos y abuelos. Una preparación de partido sin lugar a dudas diferente pero que le ha servido para coliderar la tabla siendo MVP Nacional de la última jornada.