MANUEL DE LA TORRE / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
El 28 de junio de 2013 ha quedado en la historia como una de las grandes exhibiciones firmadas por la
Selección Femenina. Una salida en tromba que tuvo su continuidad en los dos cuartos siguientes. Poco importaba ya el último. La
semifinal ante Serbia del Eurobasket estaba ya vista para sentencia.
Una oda de buen baloncesto a la que se apuntó una protagonista inesperada.
Cristina Ouviña pasó de disputar un total de 20 minutos en las siete citas previas a contar con 26 en la antesala de la final ante la anfitriona Francia. Del segundo oro europeo español.
“A nivel colectivo estaba muy confiada, sabía que íbamos a ganar”, reconocía la base después de deslumbrar en Orchies. Ouviña, en su primer gran campeonato con la Femenina, se encargó, desde el momento en el que salió desde el banquillo, de mantener bien engrasada la maquinaria de juego española. Una actuación estelar que pilló por sorpresa a la propia protagonista:
“A nivel individual no esperaba algo así, pero tenía que aprovechar la oportunidad. He podido ayudar al equipo, que es lo que quería”.
Y vaya si ayudó a la Femenina camino de su tercera final continental. Cris estuvo infalible desde cualquier distancia (tres triples sin fallo incluidos). Un acierto que le impulsó a los
19 puntos, marca que sigue siendo su plusmarca como internacional. Todo al mismo tiempo que repartió 4 asistencias y capturó 4 rebotes.
Junto a Sancho Lyttle, la base zaragozana fue la gran protagonista de la paliza (
88-69) a Serbia en semifinales. Imposible imaginar una manera mejor de tirar la puerta abajo. Un doctoramiento a lo grande.
Sus números en… 26 minutos
19 puntos
4 rebotes
4 asistencias
1 robos
8/10 en tiros de campo (3/3 en triples)
0/1 en tiros libres
Cristina Ouviña con la Selección
Puro carácter, garra, clase y versatilidad, Ouviña tenía
cuatro medallas en categorías de formación (incluida la histórica plata en el Mundial U19 de 2009 en Bangkok) cuando debutó con la Absoluta en los amistosos de preparación para el Eurobasket 2011. Sin embargo, su primera gran cita con la Femenina fue, tal y como acabamos de ver, en el Europeo de 2013 en Francia. Una exitosa y dorada primera toma de contacto. Ya más madura y después de varios veranos quedándose a las puertas, Ouviña regresó al grupo para ser importante y conseguir el bronce en el Mundial de Tenerife 2018. Un año después, en Belgrado, lograría su tercer metal y segundo Oro europeo. A sus 29 años y con
81 internacionalidades a la espalda, Ouviña se ha afianzado como un timón de probada eficacia para el equipo nacional.