ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Como ocurriera en la primera fase, Alemania se estrelló de nuevo ante España. El cuadro teutón se quedó sin respuestas en la semifinal del Europeo U20 de Israel ante la Selección. El equipo de Joaquín Prado fue muy superior. Supo controlar las embestidas del rival en la primera mitad y pisar el acelerador tras la reanudación. España peleará este domingo en Tel Aviv por el tercer oro continental de su historia en la categoría.  Francia o Israel serán el rival en la gran final. Un partido que arrancará este domingo 21 a las 19:30 horas (una hora menos en Canarias) y que podrá seguirse en directo por Teleporte.

La salida española fue de diez. Un triple de Ignacio Rosa y un 2+1 tras un potente mate de Osas Ehigitor impulsaron de salida a los de Prado con un 6-0. No obstante, a base de triples, Alemania dio enseguida un paso al frente. Como resultado, vimos un trepidante primer cuarto en el que los nuestros se marcharon dominando por un ajustado 25-23.

El segundo periodo no mantuvo el nivel de acierto del anterior. Ambos países intercambiaron golpes hasta que en los minutos finales la clase española comenzó a dejar su sello. Los triples de Miguel González, la anotación de Sergi Martínez (un titán que concluyó con 18 tantos y 13 rebotes en su cuenta personal) y el trabajo de Ignacio Rosa colocaron el 44-39 al paso por vestuarios.

No obstante, la clave del triunfo reside en el trabajo realizado en el tercer cuarto.  Una gran defensa que colapsó a Alemania. Todo, mientras Carlos Alocén se hacía con el timón del encuentro. Tras completar una irregular primera mitad, el base ofreció toda una lección en este tercer envite. Con confianza y calidad, pasó por encima del rival. Y con él, la Selección. Un parcial de 12-0 dio alas al combinado de Joaquín Prado. En un instante, pasamos del 44-42 al 56-42. Renta que fue ampliada hasta el 64-48 a poco menos de 12 minutos para la conclusión.

Alemania no bajó los brazos y trató de reengancharse al partido. Aunque con más corazón que cabeza. Sobre todo, porque enfrente se encontró con una España que no se relajó en ningún momento. Siempre manteniendo la psicológica barrera de los 10 o más tantos de ventaja. A pesar de convertir menos triples, la Selección plasmó su superioridad bajo los aros (y sin Joel Parra, caído e combate en los cuartos de final ante Turquía). Contuvo con solvencia y profesionalidad el intento de reacción teutón pata acabar disfrutando en los últimos compases. La decimoquinta medalla masculina en categoría U20 es una realidad. Ahora, hace falta conocer el color de la misma.