Cinco años después del éxito de aquella generación de oro de los Navarro, Pau, Felipe y Raül que también fue campeona del mundo, otra gran selección española volvió a ganar el Europeo Júnior, en Zaragoza. Aquel segundo grupo de campeones no ha tenido globalmente un futuro tan brillante como el que la precedió, pero dos de sus integrantes (Sergio Rodríguez y Sergio Llull) son ahora piezas muy importantes del Real Madrid y de la selección absoluta, a la que han llegado también Carlos Suárez y Xavi Rey. Este último no pudo jugar aquel Europeo por una lesión.
JUAN ANTONIO CASANOVA
La selección que dirigía Txus Vidorreta ganó sus tres primeros partidos, a Lituania, Israel y Grecia , pero cerró la primera fase con dos derrotas, ante Bulgaria (74-75) y Turquía (75-78), que sembraron dudas sobre sus posibilidades de éxito. Sin embargo, en los tres últimos días, en otros tantos duelos a vida o muerte sin posibilidad de respiro, el equipo multiplicó su rendimiento. Se deshizo en cuartos de Rusia (101-81), anotando 32 puntos en el segundo cuarto y otros tantos en el último, en un recital de Sergio Rodríguez (29 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias) y Antelo (30 puntos, 6 rebotes). Italia fue la víctima en la semifinal: 95-78, con 20 p. y 15 r. de Antelo y 21 p. y 9 r. de Suárez. Y el 18 de julio, en la gran final, se tomó cumplido desquite (89-71) ante la Turquía de Savas, Erden y Akyol, remontando un comienzo preocupante (0-9). Un parcial idéntico, pero de signo contrario, al inicio del último cuarto acabó con todas las dudas (72-56). Las tres estrellas del equipo volvieron a lucirse: 27 p. y 11 r. de Suárez, 22 p. y 13 r. de Antelo y 20 p. y 11 a. de Sergio Rodríguez.
Este último, que jugaba entonces en el Estudiantes, fue elegido MVP, tras promediar 19 p., 8,5 a. y 4,6 r., muy bien acompañado por Suárez (20,1 p., 8,1 r) y Antelo (19,3 p, 10,5 r.). Llull, que todavía no había explotado, se quedó en 1,5 puntos porque jugó menos de 4 minutos por partido.
Aquel mismo 18 de julio las júniors españolas perdían ante Rusia (77-59) la final del Europeo de la categoría.
En el 2011, los júniors, dirigidos por Luis Guil, lograron su tercer título europeo, en Wroclaw, al derrotar a Rusia en la final por 71-65 para culminar el torneo perfecto: nueve victorias en nueve partidos. Abrines (13,1 puntos y 4,8 rebotes) fue el MVP y también destacaron Jaime Fernández, Díez, Sanz, Vives, Willy Hernangómez...