El que fue seguramente el mejor partido de la carrera de Charles Barkley (Leeds, Alabama, 20/II/1963), uno de los más grandes jugadores de su época y el más especial, sirvió para llevar a su equipo de entonces, Phoenix Suns, a la final de la NBA 92-93, en la que se vería las caras con su buen amigo Michael Jordan, compañero de muchas partidas de golf y de póquer.
JUAN ANTONIO CASANOVA
Los Bulls lograron su tercer título consecutivo con un 4-2 y Barkley ya no jugó ninguna otra final, aunque aquella temporada le quedó el consuelo de ser el MVP, con 25,6 puntos, 12,2 rebotes y 5,1 asistencias de promedio.
La final de la conferencia Oeste, entre los Suns y Seattle Supersonics, llegó al séptimo partido, que se jugó en Phoenix el 5 de junio. Fue el del recital de Barkley, que se lanzó con decisión sobre la defensa visitante y provocó con ello un sinfín de faltas que causaron la eliminación de Shawn Kemp y le permitieron lanzar 22 tiros libres, de los que convirtió 19, que sumados a un 11/19 en tiros de dos y 1/1 triple elevaron su total a 44 puntos, más 24 rebotes., decisivos para la victoria por 123-110.
Fue la mejor, pero no la única exhibición en los playoffs de Barkley, un enorme competidor, agresivo a más no poder en ambos lados de la pista, habituado a luchar (y a ganar la partida) contra rivales mucho más altos que su 1,98 m. oficial (en realidad, algo menos). Una fiera que se crecía en los duelos decisivos. Cuatro días antes de aquel partido, en el quinto contra los Sonics, Barkley aportó 43 puntos (16/22 de dos, 11/11 tiros libres), 15 rebotes y 10 asistencias a la victoria de los Suns (120-114). Y al año siguiente, en el tercero de la primera ronda contra Golden State Warriors, un triunfo por 140-133, se fue hasta los 56 puntos (20/27 de dos, 3/4 triples, 7/9 tiros libres), más 14 rebotes y 4 asistencias.
Tras jugar tres años en la universidad de Auburn (14,1 puntos y 9,6 rebotes), Barkley fue el n.º 5 del “draft” de la NBA en 1984, elegido por Philadelphia 76ers, con los que en la temporada 86-87 fue el máximo reboteador de la NBA (14,6). En 1992 pasó a los Suns y en 1996 a los Rockets, donde se retiró en el 2.000. Estuvo cinco vecss en el equipo ideal y en 11 “All Star” y fue campeón olímpico en 1992 y 1996. Sólo él, Kareem Abdul-Jabbar, Wilt Chamberlain y Karl Malone han acumulado más de 20.000 puntos, 10.000 rebotes y 4.000 asistencias en su carrera.