Llegaba España al Pabellón Siglo XXI con una camiseta con el lema ‘Ánimo Mendi’ después de enterarse horas antes que el bravo alero del CAI Zaragoza tenía roto el dedo del pie en un choque fortuito en el partido ante Mali. No sabemos si estaba en la mente de los jugadores de España este percance en el  primer  tiempo pero seguro que su espíritu ha estado en la defensa y el carácter que ha demostrado el equipo en el segundo.

Errores ofensivos y defensivos  (9-18)
Costó entrar en el partido a los dos equipos. Minutos de tanteo, propios de dos equipos que se conocen, tienen mucho respeto y que ya se midieron en el Europeo del verano pasado donde Lituania fue 2ª y España 4ª.  Hasta el 6-4 los puntos llegaban a cuentagotas. Sergi Martínez no recibía con ventaja y ambos conjuntos acumulaban muchos errores y pérdidas. Un parcial de 0-6 puso el 4-11 y obligó a Alejandro Martínez a pedir un tiempo muerto. Lituania despertaba en ataque pero en España sólo Miguel González veía aro (anotó 7 de los 9 puntos de España en este cuarto). La tensión se fue de las muñecas lituanas mientras que las 12 pérdidas de los españoles en 10 minutos certificaban que todavía estaban en los jugadores de España.

Carácter, tensión pero con problemas de rebote (32-40)
En el inicio del segundo cuarto apareció Sergi Martínez. Cuando el partido está más abierto el ala-pívot español se siente más cómodo y anotó en los primeros ataques del cuarto. Pero Lituania jugaba con mucha fluidez en ataque, terminando siempre la jugada con el tiro más cómodo posible. Llegaron a tener 14 puntos de ventaja hasta que la entrada de Joel Parra y Joan Bernacer aportó al ataque aire fresco.  Un triple del pívot sobre la bocina dejó buenas sensaciones a un cuarto que tampoco había sido bueno. Tras 20 minutos Lituania había capturado más rebotes ofensivos que defensivos, un reflejo claro de dónde estaba uno de los problemas.

En la defensa está el camino (45-47)
La remontada se fraguó poco a poco, sin grandes alardes ofensivos y con mucho esfuerzo defensivo. España dejó a la talentosa Lituania en 2 puntos durante más de seis minutos, y con Osas haciéndose grande en la pintura y asegurando el rebote defensivo, el marcador se fue estrechando. Se llegó a colocar España por delante (43-42) pero estaba claro que sería un partido muy difícil. Lituania seguía apretando y un par de errores devolvió el dominio a los bálticos. Pero la lección estaba aprendida: el camino estaba en la defensa.

El espíritu de Mendi entra a pista (63-61)
El último cuarto de este España-Lituania tuvo todos los ingredientes de un gran partido de baloncesto. Intensidad, emoción, igualdad, ráfagas de talento enorme,… y un público disfrutando en el Pabellón Siglo XXI y siguiendo Teledeporte. Un mate a dos pies parado de Osas, un triple espectacular de Miguel González,… España volvía a recuperar el mando en el marcador y en las sensaciones del partido. Si captura el rebote defensivo, tiene mucho ganado en ataque. A falta de un minuto el marcador señalaba 63-61, antes de una sucesión de errores, de pérdidas de balón y de tiros que no quisieron entrar. Solo Busquets, desde la línea de personal, vio aro a 1 segundo del final. Victoria que, juntada a la derrota de Argentina ante Mali, asegura el primer puesto de grupo.