366 HISTORIAS - 31 MAYO
Cumbre de la rivalidad boloñesa (1998)
5/31/2016 - 10:03 AM
Los dos grandes clubs de Bolonia, “la” Virtus y “la” Fortitudo, han sido en algunos momentos de su historia el mejor equipo de Italia. Sobre todo el primero. Una larga historia que fue forjando una enorme rivalidad, cuyo punto culminante se vivió seguramente en la temporada 1998-99.
JUAN ANTONIO CASANOVA
Para empezar, el Kinder (Virtus) y el Teamsystem (Fortitudo) se vieron las caras aquella temporada en los cuartos de final de la Euroliga. El primer partido, que ganó el Kinder por 64-52, fue ya un escándalo.A 2m 06s del final, con 62-49 en el marcador, Fucka lanzó un balón contra Savic. Abbio, Carlton Myers y Danilovic iniciaron la pelea, a la que se sumaron muchos jugadores de ambos banquillos, sobre todo del visitante. El juego estuvo parado durante 10 minutos y los árbitros expulsaron a tres jugadores del Kinder (Savio, Abbio y Morandotti, que estaba en el banquillo) y a Myers, Fucka y todos los jugadores del banquillo del Fortitudo, que por tanto acabó con sólo tres en la pista: Rivers, Attruia y O’Sullivan.
El segundo partido, con menos problemas pese a la amenaza de Myers a Abbio (“lo buscaré en la pista y fuera de ella; es lo que se merece”) también lo ganó (56-58) el Kinder, que a la postre sería campeón en la “final four” del Sant Jordi de Barcelona.
Y en la final de la Lega volvieron a encontrarse. Los dos primeros choques no pudieron ser más igualados: 80-81 del Teamsystem y 76-78 del Kinder, que volvió a perder en casa el tercero (69-76) y a ganar a domicilio el cuarto, también ajustadísimo (57-59).
El título se decidiría el 31 de mayo. Y fue el decimocuarto de la historia para “la” Virtus Kinder, después de la serie final más emocionante que se recuerda. El cuarto en cuatro temporadas en Italia para Sasha Danilovic, que después de fallar en tres de los cuatro partidos anteriores acabó siendo en el quinto el artífice del éxito de un equipo que perdía por 11 puntos a falta de 6m 38s y todavía por 4 con sólo 18s por delante.
Tampoco aquel día se estaba luciendo. Llevaba sólo 7 puntos (0/5 triples) cuando quedaban 12s, pero todo cambió con su triple y tiro libre adicional por una falta de Dominique Wilkins que llevaba al empate a 72 y a la prórroga. Ésta llevó el sello del serbio, que sumó 9 puntos, los mismos de la diferencia final (86-77), y acabó con 20, dos menos que su compañero Abbio. En el rival, 27 de Myers y 17 de Rivers y Chiacig.