Si el famoso triple de Mike Ansley que habría dado al Unicaja el título en la Liga ACB 94-95 no entró (ver 18/V), uno de Pepe Sánchez frente al mismo rival, el Barcelona, fue decisivo para llevar al equipo malagueño a su primera, y de momento única, “final four” de la Euroliga, la de la temporada 2006-07.
JUAN ANTONIO CASANOVA
Fue el 12 de abril, ya no en el pabellón de Ciudad Jardín sino en el Martín Carpena. Una caldera todavía mayor.
El Unicaja ya había ganado allí el primer partido del playoff (91-75), pero en el segundo, en el Palau Blaugrana, fue víctima (80-58) del partidazo de Navarro, que marcó 25 puntos en sólo 18 minutos. En el tercero, Sergio Scariolo logró que predominaran el físico y la defensa. Prueba de ello es que el máximo anotador fue el esloveno Tusek con sólo 15 puntos, 7 de ellos en tiros libres. En el Barça solamente pasó de 10 Fran Vázquez (12), que cinco años más tarde volvería al Unicaja en una tercera etapa malagueña, aún vigente hoy en día. Los azulgrana, después de remontar, no supieron mantener la ventaja (51-56) que tenían a falta de 4 minutos ni el 58-60 a un minuto y medio del final y, con 7 segundos y 7 décimas en el crono, el base argentino Pepe Sánchez (que no se llamaba José, sino Juan Ignacio, y que aquel verano ficharía por el Barça, donde no triunfó, y al cabo de un año se fue al Madrid) clavó un triple que ponía el 65-62 y sería decisivo. Todavía hubo tiempo para que Navarro y Marcus Brown transformaran dos tiros libres cada uno y Lakovic fallara los dos suyos. El 67-64 dejaba al Unicaja en la “final four” de Atenas.
“Nunca en mi vida había visto preparar un partido así a los jugadores. Es el éxito deportivo que más valoro”, proclamó Scariolo, que apareció en la sala de prensa con un chándal del Inter de Milán, porque su traje se había quedado empapado en la ducha. Por su parte, Dusko Ivanovic afirmaba que “el Unicaja no ha demostrado ser mejor que el Barcelona”.
En la “final four” había dos equipos españoles, pero ninguno de ellos llegó a la final. Se desvanecía así la posibilidad de un triplete, porque el Real Madrid había ganado la Copa ULEB y el Akasvayu la Eurocopa de la FIBA. El Unicaja, sin el pívot puertorriqueño Santiago, que había sufrido un desprendimiento de retina en el segundo duelo con el Barça, cayó en la semifinal ante el CSKA de Moscú (62-50), y el Tau, que había eliminado con un 2-0 al Olympiacos, tampoco tuvo opciones (67-53) frente a un Panathinaikos que lograria su cuarto título en un duelo apasionante con los rusos (93-91).