366 HISTORIAS - 21 FEBRERO
Muere el maestro Díaz Miguel (2000)
2/21/2016 - 11:07 AM
El lunes 21 de febrero del 2000 fue un día muy triste. A medianoche, el cáncer infligía la derrota definitiva al maestro Antonio Díaz Miguel (Alcázar de San Juan, Ciudad Real, 2/VII/1933), el hombre que durante sus casi 27 años como seleccionador, todo un récord mundial, había modernizado el baloncesto español y había llevado al equipo nacional (como él lo llamaba siempre) al primer plano internacional.
JUAN ANTONIO CASANOVA
Fue, como escribimos entonces, un pionero y un perfeccionista, hasta la exageración, que bebió de las fuentes americanas cuando aquí sonaban a chino. Fue el primer español que entró en el Salón de la Fama de EE.UU.
Una fama que se ganó como seleccionador, por supuesto, aunque había sido un buen jugador, que sabía utilizar su estatura (1,85 m) y su fortaleza para moverse muy bien en posiciones interiores. Había comenzado en el fútbol, pero se pasó al baloncesto a los 17 años, cuando en su colegio, el Ramiro de Maeztu, se fundó el Estudiantes. Luego jugó en el Real Madrid, con el que obtuvo dos Ligas, y fue 27 veces internacional, entre 1952 y 1959, ganando la medalla de oro en los Juegos Mediterráneos del 55. Nada comparable a lo que conseguiría en los banquillos, en los que debutó en 1962 al frente del Águilas de Bilbao, equipo en el que acababa de colgar las zapatillas.
En noviembre de 1965, después de un octavo puesto en el Europeo al mando de Pedro Ferrándiz, le nombraron seleccionador, en principio sólo para un torneo amistoso en Ámsterdam y a la espera de que el estadounidense Ed Jucker se hiciera cargo del equipo. Pero permaneció en el cargo hasta el “angolazo” de los JJ.OO.’92 (ver 31/VII).
Su primer gran éxito fue la medalla de plata en el Europeo’73, la segunda de la historia para la selección, que se repitió diez años después. Hubo también un bronce, en el 91, y muy por encima de todo la plata olímpica de Los Angeles’84, que durante muchos años, hasta que llegaron los títulos mundiales de baloncesto y de fútbol, supuso el mayor éxito internacional de España en un deporte colectivo, por encima de la Eurocopa de fútbol de 1964.
Una anécdota, solamente una, para reflejar su fuerte carácter. Durante el Mundial’90, en el que estaba siendo muy criticado, convocó una rueda de prensa en Buenos Aires con los doce jugadores juntos, uno al lado del otro, y animó a los presentes a “repetir lo que estáis diciendo, ahora que estamos todos delante”.
Tras dejar la selección entrenó en Italia al Clear Cantù y aquí al Pool Getafe femenino.