ENERO 20
Muere un señor del baloncesto (1965)
1/20/2016 - 10:43 AM
La muerte de Joaquín Hernández, el 20 de enero de 1965, causó una enorme conmoción en el baloncesto español, aunque su delicado estado de salud no era un secreto. Conmoción por su juventud, pues aún no había cumplido los 32 años, y por su brillante trayectoria, como jugador y como entrenador. Pero también por sus grandes valores personales: modestia, compostura, deportividad extrema.
JUAN ANTONIO CASANOVA
Nació en Bilbao el 5 de febrero de 1933, pero su familia emigró a Bélgica al estallar la guerra civil y fue allí, lógicamente, donde empezó a jugar a baloncesto. Su vida cambió por completo a raíz de su presencia en la I Copa Ciudad de Barcelona, formando parte de una selección de Bruselas, de la que era el integrante más joven. Regresaría a los pocos meses, en 1951, ya como jugador del RCD Espanyol (entonces Español), que con la gran pareja exterior que formó aquel base genial con Vicenç Lloret, tres veces internacional, vivió la época más brillante de su historia hasta que en 1955 Raimundo Saporta se llevó a Hernández al Real Madrid.
La noticia del fichaje se conoció el mismo día, el 24 de julio, en que España ganaba en Barcelona a Egipto (61-55) y se colgaba la medalla de oro de los Juegos Mediterráneos. En aquel partido contribuyó con 13 puntos, pero había sido dos días antes, en una gran victoria (101-89) sobre Italia, que obtendría la medalla de plata, cuando, junto a los 42 puntos de Jordi Bonareu (ver 12/II), Joaquín Hernández (19 puntos y una excepcional visión del juego) brindó la mejor actuación de sus 41 partidos con la selección española, en la que había debutado el 30 de mayo de 1959, frente a Irán, en el Campeonato de Europa de Estambul. El primer Europeo para los nuestros desde el debut de plata en 1935.
Joaquín Hernández stuvo cinco años en el equipo madridista, con el que ganó dos Ligas y una Copa, y en 1960 pasó al Hesperia, el filial, como entrenador juvenil. Al año siguiente entrenó al juvenil madridista y en 1962 se hizo cargo del primer equipo blanco… y de la selección española. Una etapa brillantísima, en la que el Madrid ganó las dos Ligas y su primera Copa de Europa (1963-64), aunque muy corta, por la afección hepática que acabaría con si vida. A la selección la dirigió en 40 partidos y, a pesar de un conflicto con los jugadores del Estudiantes, fue la mejor de Europa Occidental (séptima) en el Europeo’63, aunque luego no se clasificó para los JJ.OO. de Tokio.