PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Cuando apenas quedan unos días para la disputa de las finales de la Copa Príncipe y Adecco Plata 2015, los técnicos Natxo Lezkano, Lisardo Gómez, Toni Ten y Javi Juárez se afanan en preparar la mejor de las estrategias para sorprender a sus respectivos rivales y alzarse con el título. Después de 5 meses de competición, las plantillas están rodadas y gran parte del trabajo hecho pero… ¿debe un entrenador contar con el factor estadístico e histórico para afrontar la cita? La gran mayoría de ellos le responderá que no, que el éxito está en el trabajo diario y en cómo llegue su equipo a la cita, pero hay una serie de datos y factores de gran importancia que podrían ayudar a decantar las finales hacia uno u otro lado y que nos pueden servir para tratar de despejar unas primeras incógnitas que tendrán su resultado final sobre las pistas del Marta Domínguez y el Ciutat de Castelló. 

Estos son algunos de los números y datos más atractivos de cara a las finales: 

El factor cancha, del calvario al éxito: 

Por norma general, las competiciones Adecco son ligas tremendamente igualadas y localistas donde es realmente costoso imponerse a domicilio; ni siquiera ser líder destacado te garantiza la victoria en casa del colista más hundido. Una tradición liguera que no se cumple en las Copa Príncipe, donde el anfitrión tan sólo levanta el título en el 50% de las ediciones (9/18), y en la Copa Plata, donde las cifras descienden ligeramente hasta el 44% tras la victoria del CB Prat a domicilio en la final de 2014 (6/14).

Si hacemos caso a la historia global de la competición los datos predecirían sendos triunfos visitantes de Ribeira Sacra Breogán y Amics Castelló pero…. ¿Y si atendemos a las cifras recogidas en los seis últimos años? En ese caso, Quesos Cerrato Palencia tendría motivos para soñar con su primer título ya que desde que se instaurara el nuevo sistema de partido único en 2009, el club local ha levantado el 100% de las Copas quedando las 6 disputadas en casa de Lucentum Alicante, Melilla Baloncesto, Blusens Monbus, Iberostar Canarias, Ford Burgos y River Andorra MoraBanc.

En el caso del Amics Castelló, los levantinos optarían a mantener una historia local que comenzaron en la Adecco Plata el Palencia Baloncesto (2009), el Lobe Huesca (2010) y el  CB Clavijo (20011),  y que rompería en 2012 el Aurteneche Maquinaria, único equipo capaz de ganar la Copa a domicilio hasta que el pasado curso el CB Prat de Carles Durán hiciera lo propio sobre la pista del Baloncesto Fuenlabrada.

El campeón lo será por menos de 10 puntos: 

O al menos así ha ocurrido en el 73 % de las ocasiones desde la temporada 1996/97 (22/30), un porcentaje que se dispara en la Copa Adecco Plata donde el 86% de las finales se han resuelto por 10 puntos o menos (12/14) y que se estabiliza en la Copa Príncipe donde un 59% de las finales mantuvieron la emoción hasta el final (10/17), un dato incrementado desde 2010 hasta 2014 con finales igualados en Melilla, Santiago de Compostela, La Laguna y Burgos y roto el pasado curso por River Andorra con su autoritario triunfo ante Quesos Cerrato (77-61).

Un largo historial de victorias apretadas que tuvieron su mayor exponente en la Adecco Oro en la campaña 2004/05 cuando el Fuenlabrada se impuso a IBB Menorca por un único punto en un encuentro que se decidió con un tiro fallado sobre la bocina del “menorquín” Terrence Stewart. Para romper con la historia, Alicante Costablanca logró hace cinco campañas la mayor diferencia registrada hasta la fecha al imponerse en su feudo por 35 puntos al Melilla Baloncesto. El marcador más apretado, en este caso en Adecco Plata, se ha repetido hasta en tres ocasiones con las victorias por dos puntos de CB Tarragona (2001), Caja Rioja (2004) y Akasvayu Vic (2008) mientras que la más amplia tuvo lugar hace tan sólo cinco temporadas cuando el Lobe Huesca levantó el título en su cancha al derrotar al Huelva La Luz por un total de 22 tantos.

Noveles y campeones, cara a cara: 

Las finales de Copa Príncipe y Copa Adecco Plata supondrán un doble enfrentamiento entre equipos noveles en lo que a títulos se refiere y unos campeones que pelearán por su segundo título a domicilio. En el caso de la Copa Príncipe, el Quesos Cerrato Palencia peleará por su primer título tras la final perdida el pasado año en Andorra ante un Ribeira Sacra Breogán que saldó su primera y única final con el título de campeón allá por el año 2008 con la final disputada en Zaragoza.

Algo similar sucederá sobre la cancha del Amics Castelló donde los locales, inéditos en esto de las Copas Adecco, tratarán se sumar su primer trofeo ante un CEBA Guadalajara que levantó el título ejerciendo como anfitrión dos años atrás con el técnico Ángel Cepeda al frente del equipo.

¿Llegará el doblete del Quesos Cerrato venciendo a la maldición?

La edición de la Copa Príncipe 2014 le sirvió al River Andorra para hacer saltar por los aires su propia historia negativa, aquella que les llevó a disputar hasta seis finales en tres temporadas cayendo en todas ellas. En su séptimo intento, los andorranos pusieron punto y final a una maldición de la que quiere huir ahora los palentinos tras haber caído el pasado curso en las dos finales disputadas tanto en la Copa Príncipe como en el playoff final por el ascenso. Y si fuese Quesos Cerrato el ganador de esta Copa, los de Natxo Lezkano se convertirían en el tercer equipo capaz de ganar el título tanto en Adecco Oro como en Adecco Plata tras su conquista de 2009 en una final disputada en Palencia. Anteriormente tan sólo lo lograrían Ourense Baloncesto y el Ford Burgos tras su doblete en Plata y la final conquistada dos años atrás en El Plantío.

Los precedentes apuntan al Quesos Cerrato Palencia…

Pese a su derrota del pasado curso, en esta ocasión, la historia juega a favor de un Quesos Cerrato que se aferrará a los precedentes. Y es que, en las cuatro ocasiones en las que el subcampeón repitió final un año después, este terminó haciéndose con el título. Y si no que se lo digan al Unelco Tenerife de Paco García, primer equipo de la historia capaz de ganar una final (Inca 2003) tras repetir participación al año siguiente de lograr el subcampeonato (Ourense 2002), o al Melilla de Gonzalo García quien levantara el título en su propio feudo (2010) tras haber naufragado un año antes en Alicante (2009).

Durante los dos últimos años se han creado nuevos precedentes, primero con el Ford Burgos de Andreu Casadevall que levantó el título en su pista (2013) tras haber perdido un año antes en la cancha del Iberostar Canarias (2012) y después con un River Andorra que se sobrepuso a la final perdida en El Plantío (2013) venciendo al propio Quesos Cerrato en la última edición (2014). ¿Serán los palentinos el quinto equipo en lograrlo tras perder en el país de los Pirineos y clasificarse como organizadores un año más tarde?

…Pero Ribeira Sacra busca el doblete

Tan sólo Melilla Baloncesto, Fuenlabrada y Lucentum Alicante han podido llevar más de un título a sus vitrinas. Los dos primeros no fallaron durante sus dos primeras finales, un camino que quiere emular ahora un Ribeira Sacra que obligó, con su primera final en 2008, al Lucentum Alicante a disputar una tercera final para poder hacerse con su segundo título. En caso de triunfo, los de Lisardo Gómez ingresarían en el selecto grupo de históricos bicampeones.

Los MVPs tendrán sabor nacional: 

Así lo desvela una estadística que había repartido prácticamente a partes iguales los MVPs de las primeras 14 ediciones entre nacionales y foráneos. El dominio nacional iniciado por Alberto Corbacho en 2011 encontró continuidad en la figura de Nacho Yañez (2012) e Isaac López (2013) decantando la balanza con un total de 11 galardones para los nuestros y de 7 para jugadores de fuera de nuestras fronteras. El norteamericano Taylor Coppenrath fue el último triunfador individual no nacional tras hacerse con el título en la edición 2010 de Melilla.

Las estadísticas apuntan por tanto a un MVP nacional al que optarán 7 de los 11 jugadores del Quesos Cerrato y 6 de los 11 del Ribeira Sacra Breogán a la conclusión de una final en la que participarán un total de 13 jugadores nacionales y 9 foráneos.

En el caso de la Adecco Plata, el dominio nacional es una constante en los últimos años con los galardones de jugadores de la talla de Alberto Ausina (2012), Sergio Llorente (2013) o Sergio Pérez (2014).  

Urko Otegui vs Dani López, duelo de palmarés personal: 

Nadie ha disputado más partidos de Copa Príncipe que un Urko Otegui que jugará su octavo encuentro en una competición en la que ha estado presente en un total de 4 de sus finales. Con un único título en su vitrina particular -León 2007- el ala pívot quiere resarcirse de las finales perdidas con Menorca Básquet y Quesos Cerrato llevando al equipo palentino a la consecución del que sería su segundo título personal dando forma a un palmarés en el que figuran 4 ascensos a la Liga Endesa.

Aunque si hay un valor prácticamente seguro de cara a una final de Copa Príncipe ese es un Dani López que podría dar caza a tres históricos como Jorge García, Nacho Yañez y David Gil con su tercer título de Copa Príncipe. El base salmantino ha levantado ya el título con el propio Ribeira Sacra (2008) así como con un Ford Burgos (2013) con el que no pudo vencer en su primera final con la camiseta castellana (2012). Dani es el único superviviente de la primera Copa Príncipe del Ribeira Sacra repitiendo en la final junto a tres de los integrantes de aquel roster: el técnico Lisardo Gómez (por aquel entonces ayudante), el delegado Francisco de Andrés y la físio Belén Díaz.

Motivación doble: ganar la Copa, paso previo al ascenso: 

Levantar a lo más alto del pabellón la Copa tanto en Adecco Oro como en Adecco Plata ayuda notablemente a lograr el ascenso de categoría al final de temporada. Un 72% de los campeones de Copa Príncipe (13/18) culminan el año en la ACB tal y como hizo el pasado curso RIver Andorra mientras que un 57% de los campeones de Copa Adecco Plata (8/14) logran llevar a sus clubes a la Adecco Oro. Si extendemos el dato a los finalistas del evento, un 70% de los equipos que juegan la final de Oro (24/34) ascienden, mientras que en Plata las posibilidades de ser finalista y subir son del 50%.

Tan sólo en dos ocasiones en la historia de la Adecco Oro, los dos finalistas de Copa consiguieron ascender de la mano a la ACB (10%), estos fueron el Baloncesto Fuenlabrada y el IBB Menorca en la campaña 2004/05 y el Blusens Monbus y el CB Murcia hace tan sólo cuatro temporadas (2010/11). En Adecco Plata sucedió en otras dos ocasiones con el doble triunfo de Bilbao Basket y CB Tarragona en la 2001/02 y del Akasvayu Vic e Illescas Urban en la 2007/08 (15%). La historia reciente favorece por tanto a la Adecco Plata donde los campeones de 5 de las últimas 7 ediciones lograron ascender ese mismo año: Akasvayu Vic, Faymasa Palencia, Lobe Huesca, CB Clavijo y CB Prat. En el mismo periodo en la Adecco Oro, Alicante (2009), Blusens Monbus (2011), Iberostar Canarias (2012), Ford Burgos (2013) y River Andorra (2014) lograron el ascenso deportivo. 

¿Qué sucedería si los campeones no lograsen el ascenso directo?:

Según reza la normativa de competición; “si el equipo vencedor de cada una de las Copas Adecco finalizara entre los equipos clasificados para participar en esta Fase, tendrá asegurado el segundo puesto de la Liga Regular, produciéndose en consecuencia la correspondiente colocación de puestos hasta el que obtuvo en la Fase Regular el Campeón de cada una de las Copas, enfrentándose siempre al peor de los clasificados, teniendo además ventaja de campo, siempre y cuando quede clasificado entre los cinco primeros al término de la liga regular”.