ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

El final del jueves trajo una actividad muy interesante en lo que se ha convertido en el centro neurálgico de ‘la semana del mini’, el Centro de Congresos de San Fernando. Tras la charla de la mañana, más centrada en el ámbito empresarial, a la tarde le tocó el turno a la parte más deportiva, pero con un matiz muy especial: entrenar en valores.

Elisa Aguilar e Isa Sánchez, dos de las jugadores referencia de nuestra Selección de la última década, departieron con todos los presentes bajo la charla ‘Escuela de Padres, entrenadores y jugadores’. Con sus carreras como ejemplo, ambas ex jugadoras hicieron un recorrido por lo que el baloncesto les ha aportado en su forma de ser, en su educación, en su escala de valores… Lo más importante para ambas es “disfrutar” para que el baloncesto sea algo que nos acompaña y, en boca de Elisa, es clave la ayuda: “Para llegar tan alto hay que apoyarse en muchos hombros”. Y para ello están los padres y madres.

Isa Sánchez intentó explicar que jugar a cualquier deporte de forma profesional no tiene por qué estar reñido con los estudios: “Mi madre me decía, ¿tú quieres jugar? pues entrena. ¿Qué quieres ser médico? pues estudia”.

Para Elisa también es así. Licenciada en Empresariales –Isa lo es en Medicina- el baloncesto lo ha sido todo para ella pero cree “que es importante tener algo más”. “Yo creo que es necesario tener conversación en una mesa más allá del deporte”, apunta Elisa. Y para Isa está claro: “El que dice, o la que dice, que no puede estudiar y compaginar el deporte es que está poniendo excusas”.

Con muchos niños y niñas con sus padres en la sala, las dos ex internacionales hablaron de los valores que ellas encuentran en sus carreras gracias al baloncesto. “Perseverancia, pasión, compañerismo, generosidad… son actitudes importantes en nuestras vidas”, añadió Isa que también habló de los cinco ideales a alcanzar en el baloncesto como “respeto, formación, ilusión, reconocimiento y disciplina”. Elisa tiene grabada una frase que le dijo su madre y que ha llevado a rajatabla en su carrera deportiva y en su vida: "Que nadie te pueda echar en cara que no te has esforzado".

La charla acabó de una forma muy amena. Ambas jugadoras ‘lanzando’ preguntas a los asistentes que recibían camisetas de la Copa del Mundo de regalo con cada respuesta acertada y una gran foto de familia para concluir el acto.