Miguel Panadés 

Profesor de fisiología en la Universidad de Sevilla y, durante casi tres horas en La Laguna, profesor de los aspirantes a Entrenador Superior. Antonio Escribano volvió a ofrecer una sesión de conocimiento aplicable al deporte, al baloncesto y, sobretodo a la vida. Porque cada vez que el doctor que diseña la alimentación de todas las selecciones españolas de baloncesto y la dieta de muchísimos deportistas de élite expone sus sabios planteamientos, la conciencia de cada uno de los presentes suele cuestionarse si realmente tiene lógica la dosis de calorías que ingerimos y, derivándolo hacia el baloncesto, si esa lógica la cumplen los deportistas.

El Doctor mantuvo a los alumnos atentos a una serie de argumentos contundentes, muchos de ellos relacionados con la importancia de la relación del peso y la fuerza o, más práctico, la edad. Porque si la fuerza muscular decrece con los años lo más lógico es que los deportistas que alargan su carrera deportiva disminuyan los quilos sobre que deberán soportar esas rodillas utilizadas continuamente en los saltos. Conocer las cualidades de los alimentos, conocer la respuesta de nuestro cuerpo cuando los ingerimos, el tiempo que pasará en cada caso para que hagan el efecto de combustible, la necesidad de reponer una vez finalizado el ejercicio. Y en esa línea, ser capaces de mantener los hábitos saludables que coinciden con los intereses del deporte provocó que el alumnado saliese de esa clase magistral con unos conocimientos importantísimos, imprescindibles para poder transmitirlo a sus jugadores.