“Para conseguir la excelencia hay que rodearse de gente brillante” afirma Miguel Martín elogiando el enorme trabajo realizado desde la distancia por Manuel Falero, responsable tecnológico del Área Deportiva.
Miguel Panadés
El examen del Bloque Común, una durísima prueba inicial a la que se somete a los alumnos del Curso Superior en su primer día tuvo en esta edición la innovación de realizarse online desde los propios ordenadores de los aspirantes quienes de forma inmediata conocieron el resultado de sus exámenes, reconociendo así las preguntas acertadas y las incorrectas o, en su defecto, las que deberían haber señalado. Una dura prueba para el alumnado y para la organización del Curso que tuvo en Manuel Falero, responsable tecnológico del Área Deportiva, su primer protagonista desde la organización y como no, en los 136 “sufridos” alumnos.
Como los mejores entrenadores o directores de grupo, Miguel Martín parte de la base de la importancia de rodearse de un buen equipo de trabajo. Siempre lo ha habido en el CES y en esta ocasión con perfiles renovados en los tutores, vuelve a reunir a brillantes profesionales que aportan tanta ilusión como conocimiento.
PRIMER “PARTIDO DEL CAMPEONATO”
En todo campeonato el primer partido siempre suele ser el más temido por la tensión, el desconocimiento del “rival” de los factores externos e influyentes y ahí, entre los sudores propios de los nervios iniciales, los alumnos afrontaron esa primera prueba con, en general, un talante propio de quien aspira a ser entrenador. Porque el autocontrol se convierte en un factor clave en este complicado oficio donde la presión jamás puede apoderarse de los actos.
Rostros de satisfacción saliendo de las aulas del examen mezclados con aquellos que convivirán en los primeros días con la primera derrota del “campeonato”. Un consejo a todos los entrenadores. El Curso no ha hecho más que empezar y ni haber aprobado todas las materias del bloque común garantiza “medalla” ni haber fallado en el primer partido dirige hacia el fracaso. Será desde ahora y durante las próximas dos semanas cuando la actitud, la participación, el esfuerzo, la serenidad o el talento se conviertan en los valores que determinen el resultado final. ¡Vamos!