CARMELO GUTIÉRREZ / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

El Pabellón Multiusos Aguasvivas de Guadalajara cuenta desde el pasado domingo con un invitado especial: José María Sanz Beltrán, más conocido como Loquillo. El cantante se encuentra en la ciudad alcarreña presenciando en directo las evoluciones de su hijo Cayo, que juega con el Easo 99 Aitzgorri de San Sebastián, que este martes se despidió del torneo en la primera fase.

Pero el papel de Loquillo no se limita únicamente a animar a su hijo y a sus compañeros. La página web del cantante ‘Loquillo.com’ patrocina al equipo donostiarra portando en la camiseta el mítico logo usado desde hace más de tres décadas: el pájaro loco y dos huesos.




“El factor diferencial del basket guipuzcoano debería ser la apuesta por la base y sin embargo los recortes que se dan en todos los ámbitos están llegando también ahí. Por eso los padres de los chavales nos estamos implicando en sacar adelante a los equipos. El club Easo está realizando una tarea impresionante y hay que ayudar”, señalaba el cantante en un reportaje en el ‘Diario Vasco’ a finales del pasado mes de mayo.

Loquillo siempre ha sido un seguidor del baloncesto y es habitual encontrarle en Illumbe presenciando los encuentros del Gipuzkoa Basket. Afincado desde hace unos años en San Sebastián, Loquillo se ha querido involucrar en el baloncesto de la provincia, tal y como señalaba. Primero como padre de jugador y después como patrocinador del equipo. “El baloncesto y el rock han sido mis dos mejores escuelas para la vida. El basket te enseña a formar equipos, a compartir y te otorga cierta autodisciplina”, destaca el cantante.



Su hijo Cayo,  nº17 del Easo 99 Aitzgorri, es rápidamente reconocible por sus gafas y por su gran parecido con su padre. Su equipo se proclamó campeón de Gipuzkoa sin conocer la derrota en los 20 partidos disputados. Y después logró el título del País Vasco que le valió el pase al Campeonato de España.

En Guadalajara, tras sufrir al FC Barcelona en la primera jornada, los donostiarras se quedaron a las puertas de lograr una épica remontada ante Almería Cajamar (59-58). En el último encuentro de la primera fase tenían que vencer por 9 puntos a Valencia, pero cayeron derrotados por 56 a 85.