España salió a por todas y con la intención de poner tierra de por medio en el marcador en los primeros minutos. Ese ímpetu inicial provocó que la defensa no tuviese la intensidad deseada y los islandeses lograran anotar 19 puntos, cuatro más de los que Luis Guil desea que anoten los rivales de su selección en el primer cuarto. En el segundo cuarto España sí mostró su poderío defensivo y comenzó a correr al contraataque, lo que sumado a las ventajas obtenidas en los uno contra uno se tradujo en una ventaja de 20 puntos al descanso (32-52). La segunda parte no tuvo más historia que la de ver a un equipo español que seguía metido en el partido con todos los jugadores aportando su granito de arena para aumentar la diferencia en el electrónico mientras Islandia intentaba salvar su honor mediante el tiro exterior. España se enfrentará mañana a Francia, vencedora del prestigioso Torneo de Mannheim, en el que será el primero de sus dos complicados partidos en esta primera fase del Europeo, en la que también tendrá que medirse a Croacia. España, 98 (26,26,25,21): Quim Colom (10), Xavi Forcada (13), Pere Tomás (12), Víctor Claver (15), Pablo Aguilar (15 –cinco inicial- Richard Nguema (4), Asier García (1), Xavi Rabaseda (0), Marc Rubio (11), Juan Cabot (8), Javier Vega (2) y Antonio Pantín (7). Islandia, 55 (19,13,13,10): Thorsteinsson(13), Vilhjalmsson (19), Hreidararsson (4), Einarsson (4), B. Björnsson (4) –cinco inicial- T. Johansson (5), H. Björnsson (6), E. Johansson (0), Erlingsson (0), Gudmundsson (0), Kristinsson (-) y Karason (-).