XAVI OLTRA
España volvió a hacer historia al conseguir de forma trabajada, sufrida y brillante su pase a su tercera final olímpica tras derrotar a su bestia negra, Rusia, por 67-59. Dos partes bien diferenciadas marcaron el encuentro, en el que tras el paso por los vestuarios el dominio fue totalmente español. El cuadro de Scariolo llegó a ir 13 puntos abajo en el segundo cuarto y 11 al descanso (20-31). El nefasto acierto en el tiro exterior y las notables y agresivas defensas alternativas de Rusia, con muchas ayudas interiores, colapsaron el juego de España en la primera mitad. Pero en la reanudación llegó la mejor versión española. La mejor generación de la historia de este país defendió con gran intensidad, empezó a anotar desde el exterior y sobre todo, pudo correr. Tras obrar la remontada y la igualada a 46 en el tercer cuarto, en el último tramo un 21-13 dio el triunfo a España. Calderón (14p, con 4 triples) se convirtió en el magistral director de juego, los Gasol se hicieron los amos de la pintura, Felipe dio minutos de calidad en la rotación y Rudy y Llull, la pareja balear, aportó su energía, ritmo y acierto. En definitiva, una exhibición final de todo el grupo, que permitirá a España luchar de nuevo por el oro, en este caso en la final de los Juegos de Londres.
MVP del Partido
P. Gasol
26 Val.
Pau Gasol ofreció todo un despliegue físico en un partido que lo exigía. Un choque de máxima dureza ante los centímetros de Kaun, Mozgov y compañía. El jugador de los Lakers firmó sus números habituales: 16 puntos y 12 rebotes (10 de ellos defensivos). Unas dobles figuras de escándalo, con 4/6 en tiros de dos, 2 asistencias y un tapón. Pau anotó además un triple y fue un bastión atrás, no sólo en el rebote, sinó punteando el peligroso tiro de tres puntos de sus 4.
La Clave
La reacción tras el descanso marcó el encuentro. Una cuestión de carácter, sin duda, pero también de acierto. En la primera parte el flojo porcentaje en el tiro exterior, un día más, desajustó y desequilibró el juego español. Al descanso, el 2/11 en triples y 4/18 en tiros de dos fue clarificador. Las ayudas de los rusos sobre el juego interior español fueron más efectivas que nunca ya que la posterior circulación, con tiros liberados en ocasiones para los exteriores, no sirvió para nada ante la falta de acierto. Para crear todavía más confusión, Blatt dispuso alternativas (zona de ajustes después de canasta e individual sin canasta). En individual los 2x1 al poste bajo con ayudas del lado débil para incomodar la circulación fueron constantes. Y contra zona, los Gasol tampoco encontraron espacios para postear. Pero en la segunda mitad todo cambió con el aumento de la agresividad española, tanto en ataque como en defensa. Y el acierto. España firmó 7/12 en triples en la segunda parte. La buena circulación de balón esta vez sí tuvo su premio. 4 triples de Calde y 3 de Rudy desmantelaron el proyecto diseñado por Blatt. No obstante, la victoria también fue posible gracias a la exhibición defensiva en individual, con una gran actividad que dejó a Rusia en 15 puntos en el tercer cuarto y 13 en el último. Kirilenko (10p) y Shved (2p) fueron anulados.
El Detalle Técnico
En la primera parte, la defensa del ‘pick and roll’ para España fue todo un sufrimiento. Por ejemplo, en el poste alto, un acertado Kaun (14p) hizo más daño del deseado, bloqueando arriba a Shved. El nuevo jugador de los Timberwolves leyó a la perfección el bloqueo directo y asistió a la continuación del pívot ruso, que anotó ante la tardía ayuda de los españoles. Un movimiento habitual que en la primera fase tuvo a Mozgov como protatonista. Además, Kaun se permitió el lujo de acabar contraataques, pese a sus 2,11 de estatura. También España padeció en la defensa del ‘pick and roll’ con Ponkrashov como protagonista, el jugador más creativo de Rusia. Pero todo ello cambió en la segunda mitad, en la que España se transformó defensivamente. Las segundas ayudas en la defensa del bloqueo directo llegaron siempre, fueron agresivas y provocaron infinidad de pérdidas rusas (13). España llegó a todo con gran actividad de San Emeterio, Rudy, Llull y compañía. Atrás, como no puede ser de otra forma, se forjó también la reacción española.
El Momento
Tras lograr lo más difícil, empatar el marcador en un cuarto (46-46 al final del tercero), en el último llegó la estocada. Rusia anotó la primera canasta con un dos más uno (46-49). Y ahí acabó todo. O empezó el festival español. Un parcial de 14-1 en cinco minutos dio diez puntos de margen a los españoles (60-50) a falta de 4’15’’ para el final. Dos contraataques de Llull, un gancho de Marc y un triple de Calderón hundieron al rival. El triunfo ya no se escapó pese a la ‘zona press’ de los rusos.
Conclusión
Una vez más este equipo justifica su leyenda. La mejor generación del baloncesto español jugará su segunda final olímpica y logrará una medalla más en su palmarés. Cuando hizo falta, el equipo compitió con intensidad, talento y experiencia. Ni los problemas físicos, ni las dos derrotas de la primera fase, ni tampoco algunas críticas del entorno han podido noquear la confianza plena de este grupo, que sigue haciendo historia. Pasado mañana domingo a las cuatro de la tarde España jugará por el oro ante el ganador de la otra semifinal que disputan USA y Argentina. Ahora, España ya sueña despierta.