MANNHEIM U18: España, velocidad y contundencia en Europa
4/10/2012 - 10:34 AM
La base militar estadounidense ya no es sede de este afamado torneo Albert Schweitzer, sino que se han trasladado a otro pabellón, el Waldsportshalle de Viernheim, población colindante con Mannheim, que alberga la segunda sede de este Mundobasket oficioso en la categoría sub 18, que en definitiva, es donde juega España.
ANTONIO RODRÍGUEZ / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
En una noche como la de hoy, ya no son los gritos de “USA, USA” los que se oyen en el pabellón, sino los permanentes himnos y los tambores de unos 50 aficionados serbios durante las dos horas del partido. Ya no son testigos los mayores mandos militares, casi presidiendo el choque en primera fila, sino la hilera de mesas para scouters y periodistas. Y ya no hay un parquet al que se mima, pasándose la mopa constantemente para que los brillos y los reflejos de la luz se asemejaren a la mejor arena NBA, sino un parquet sintético de color azul, mucho menos elegante.
La base militar estadounidense ya no es sede de este afamado torneo Albert Schweitzer, sino que se han trasladado a otro pabellón, el Waldsportshalle de Viernheim, población colindante con Mannheim, que alberga la segunda sede de este Mundobasket oficioso en la categoría sub 18, que en definitiva, es donde juega España. Muchos echan de menos aquello, entre los que me incluyo. Sin embargo, la selección española creo que no tanto. En este polideportivo, los nuestros cuentan sus partidos por victorias. Son ya 3 y lideran un grupo en el que englobaba Australia, Rusia y China. A primera vista, mérito tiene.
Hablar de nuestros chicos es hacerlo de velocidad y contundencia. El ritmo que están imprimiendo los de Juan Antonio Orenga es rápido, muy rápido. Aquello que en las últimas ediciones no se podía apenas, porque costaba Dios y ayuda hacerse con los rebotes defensivos, ante la falta de altura en nuestros hombres altos, ahora se logra. Porque tenemos la diferencia de contar con dos pívots que dominan los tableros, uno saliendo de titular y otro desde el banquillo: Guillermo Hernangómez e Ilimane Diop desde la rotación, otorga tal seguridad, que España puede jugar a lo que lo ha hecho toda la vida, a seguir fiel a sus principios de contragolpe y velocidad. Si no, sería inimaginable que a China se la apalizase en el debut por 88-56, que Rusia fuese doblegada (78-66) y que Australia recibiese otra veintena de diferencia (78-57), para proclamarse como cabeza destacado del grupo D.
Al margen de un estilo ya comentado, nuestros poderes, con nombres y apellidos, comienzan con Josep Pérez en la dirección. Es nuestro base más resolutivo en pista, el que tiene más chispa y desborda con facilidad. El jugador del Barcelona pone agresividad en ataque, yendo con mucha decisión a canasta y agresividad en defensa. No obstante, ya ha debutado con el primer equipo.
Nuestros aleros son los que tienen la asignatura pendiente de anotar el tiro exterior. 8 canastas de 41 intentos desde más allá de la línea, de momento, es aterrador. Sobre todo si restamos los 3 de 3 que tuvo Pérez la jornada debutante ante China. Esto convertiría el asunto en 5 de 38. Es cierto que el porcentaje de 2 es muy bueno, tanto por lo que se corre, como que saben sacar partido a las penetraciones, que muestran que nuestro combinado juega muy agresivo. Albert Homs en este aspecto, tiene un papel muy destacado. Esperemos que la confianza se vaya apoderando de ellos.
La obra y gracia que sostiene a nuestro equipo nacional con éxito, son los pívots. Guillermo Hernangómez se convierte en uno de los jugadores altos más destacados de todo el campeonato. Este chaval va a dar calidad durante muchos años al Real Madrid, su actual club. Porque es contundente, fuerte, tiene muy buenas manos, juega bastante bien con los pies y corre la pista como nadie lo hace en este torneo. Cuando hace pareja en pista con Diop, eso es un verdadero espectáculo. Y el jugador de origen senegalés da tal seguridad en la zona cuando permanece en cancha, que es muy complicado que los rivales anoten en la pintura. La seguridad defensiva que ofrece su presencia convierte sus apariciones en momentos determinantes que desequilibran el envite, como en el segundo cuarto del día ante Rusia, inicio para empezar a irnos en el marcador, y frente a los australianos, que bloqueó mentalmente cualquier intento de hacer daño en la zona. El otro jugador interior titular el Sebastián Saiz, el pívot de Estudiantes, que con su gran capacidad atlética, está aportando mucho a nuestro equipo , aportando desde el rebote ofensivo.
En fin, que en jornadas posteriores hablaremos de algunas otras selecciones, que merecen la pena ser analizadas. Para empezar, bien valga este repaso a los nuestros, que nos hace alzar la barbilla en muestra de gran orgullo. De momento, a descansar el Martes. Se lo tienen ganado.