Las salmantinas arrasaron en el inicio de partido. El equipo corrió mucho más rápido que el balance defensivo del Mann Filter y así llegaron varios contraataques, finalizados incluso por las pívots. Un 2+1 de Hayden situaba un espectacular 14-3 con sólo 3 minutos y medio de juego. Las aragonesas estaban todavía en el vestuario y, pese al tiempo muerto, pedido por Cebrián, la defensa del Perfumerías Avenida se imponía en todas las decisiones. En cambio sí mejoró la parte defensiva, aunque Whitmore se encargaba por activa y por pasiva de superar a Rasmussen en su emparejamiento. Seis puntos de la norteamericana ampliaron la ventaja a 14 (22-8), pero el Mann Filter reaccionó rápidamente con el triple poste en pista. La apuesta siguió dando resultados, de tal manera que José Ignacio Hernández respondió con la misma táctica, desplazando a Whitmore al puesto de alero con la esperanza de provocar una nueva marca de Rasmussen. Tuukkanen estaba eclipsando a Whitmore y las ideas ofensivas escaseaban en el bando. El Mann Filter le dio motivos suficientes a sus más de 300 aficionados para volver a creer. La defensa amarilla era mucho más sólida que en el primer cuarto y en ataque el balón empezó a rodar con más fluidez (27-23). Además, otro problema empezaba a cernirse sobre el cuadro salmantino y ése no era otro que las faltas: Hermoeut y Camps acumulaban tres en el minuto 16 y Hernández les concedía un respiro para futuras batallas. Asi, en la pista el Perfumerías Avenida contemplaba un quinteto inhabitual: Martínez, Ygueravide, Whitmore, Llamas y Hayden; mientras, Cebrián sentaba a Pascua y veía cómo su equipo le echaba el aliento al cogote del Avenida. Incluso un triple a la desesperada de Ivey estuvo cerca de darle la primera ventaja al Mann Filter, pero el 31-30 se mantuvo hasta el descanso. El Mann Filter confirmó su remontada tras una canasta de Tuukkanen a la media vuelta (33-34) poco antes del que pudo convertirse en el definitivo punto de inflexión del encuentro. Whitmore cometió una falta de ataque y montó cólera. El banquillo salmantino se contagió y el maremagnum de protestas se saldó con una sangría: dos técnicas y una descalificante para Whitmore y otra técnica para Hernández. Ambos tuvieron que abandonar la pista (las dos técnicas a la ala-pívot computaron a banquillo, ya que la personal señalada era la quinta) y asistir al encuentro desde la sala de prensa. A todo esto, el Mann Filter dispuso de ocho tiros libres de los que aprovechó seis, situando al equipo siete arriba (35-42). El desconcierto salmantino duró unos pocos minutos más y las aragonesa ampliaron distancias hasta los 11 puntos (41-52). El Perfumerías Avenida hizo gala de un excelente coraje y se hizo notar a partir de un triple de Yugueravide. Luego, Martínez y los rebotes ofensivos de Hayden metieron de nuevo al equipo en liza (48-52). Las chicas de Cebrián vivían de los triples, pero Navarrete sufrió una aparatosa y dolorosa caída en la que salió muy mal parada su espalda debiendo dejar el parquet. Sin embargo, el combinado maño no dejaba que el marcador se estrechara en exceso. El partido se adentró en sus últimos tres minutos y ambos equipos acusaron la responsabilidad, desaprovechando sucesivos ataques con errores en el pase y en tiro. El 57-61 parecía inamovible hasta que Hermoeut clavó su segundo triple.