REVISTA DE PRENSA – GIGANTES DEL BASKET
Entrevista de Ángel Palmi en la revista ‘Gigantes’
10/9/2009 - 7:10 PM
Reproducimos la entrevista realizada por Paco Torres al director deportivo de la FEB, Ángel Palmi, y publicada en la revista ‘Gigantes del basket’ del 6 al 12 de octubre.
Paco Torres (Gigantes)
Lleva cuatro meses sin parar de viajar. Y es que ser el máximo responsable deportivo de la Federacion Española de Baloncesto implica siempre veranos ajetreados. Y felices también. Nada menos que diez selecciones, desde categoría cadete a la absoluta, han competido en el rostro de Ángel Palmi: ocho medallas, cuatro de esllas de oro. Es para sonreír.
Que lleve en España ya casi dos semanas no significa que haya parado mucho en casa. El inicio de las competiciones de la Adecco Oro y la Adecco Plata le han impedido tomarse un respiro más allá de dejar unas maletas y preparar otras, pero sí le han permitido disfrutar con el recuerdo de todos los momentos vividos con la tranquilidad de que la cita más trascendente, la de la selección absoluta, se saldó con un oro largamente acariciado y que por momentos pareció de lo más esquivo.
Palmi: El verano ha sido excelente, tanto por lo logrado como por las sensaciones transmitidas por cada uno de los equipos, aunque soy consciente de que si en Polonia no se hubiera tenido este gran éxito la mirada sobre el verano, a pesar de los grandes éxitos, habría sido distinta, menos alegre.
Gigantes: Pero no ha sido el caso y, aunque hubiera sido así, nada podría haber empañado las otras siete subidas al podio. Felicidades.
P: Gracias. Es la constatación de que en España se está trabajando muy bien. El método FEB es objeto de seguimiento y atención por parte de otras Federaciones que ahora, a mediados de octubre, nos visitarán para conocer nuestra manera de trabajar.
G:¿Dónde está la magia?
No hay magia. Es el trabajo de alrededor de las cincuenta personas que componen el gabinete técnico, en coordinación con las Federaciones territoriales, que son las que primero seleccionan a los jugadores y jugadoras para acudir al campeonato de España de Minibasket, y también de los clubes, que son el eslabón inicial. La FEB aglutina todos esos esfuerzos y afanes. Queremos que los jugadores y jugadoras se sientan integrantes permanentes del gran equipo de España, no sólo en el momento de las convocatorias. Nos interesa su talento y su técnica, claro está, pero también su compromiso y su capacidad para competir.
Esos valores son los que pregonan desde hace muchos años las selecciones absolutas, tanto femenina como masculina.
Y esos valores son los que caen en cascada sobre el resto de las selecciones. El equipo masculino lleva cuatro años jugando finales y el femenino ha subido al podio en los últimos cinco europeos; pues bien: en cadetes, las chicas han ganado cinco oro y una plata en los últimos 6 Europeos, y los chicos, campeones este año y en 2006, subieron otras dos veces más al podio en los últimos 5 campeonatos. El ejemplo para estos chicos y chicas es nítido y se lo aportan los jugadores y jugadoras de los equipos absolutos. Los valores que ven en los mayores son sus valores.
El oro de Polonia. Usted fue el primero hace ahora un año que se atrevió a hablar del oro del Eurobasket como paso previo para ganar los Juegos Olímpicos de Londres en 2012. Tras la plata de Madrid parecía un tema tabú.
Así es, pero es que tras la final de los Juegos de Pekín, a la que quizá no le dimos la importancia que realmente tuvo, estaba convencido de que este equipo podía seguir optando a cualquier meta, como lo había demostrado en Japón y como lo ha vuelto a demostrar ahora.
Pues por momentos pareció que el sueño se iba a esfumar. En Varsovia y en Lodz las cosas pintaban muy mal.
Es cierto que el equipo no jugó al nivel que nos tiene acostumbrados en los cuatro primeros partidos del Eurobasket, pero es conocido y motivo de admiración cómo el grupo se relaciona, convive y expresa cuando las cosas van bien y los resultados son los esperados: buen rollo, compañerismo, eficacia…, pero cuando el grupo se ha encontrado con una nueva realidad, con una crisis, ha demostrado cómo es en realidad este grupo.
¿Y cómo es?
Cohesionado y coherente. Todos aportamos lo mejor de nosotros mismos en una reunión nocturna que fue un ejemplo de cómo cualquier colectivo o familia debe actuar para afrontar una situación inestable y límite.
La famosa reunión nocturna de Lodz tras el partido de Turquía, la toma de decisión de la última jugada y las palabras de Marc. Sin duda fue el punto de inflexión. ¿Tanto marcó para que el equipo fuera otros a partir de ese momento?
En realidad fueron dos reuniones, no una. La primera fue esa noche y en ella la exposición de Scariolo – liderando a todo el equipo técnico, que ha trabajado desde el primer día con una coordinación y eficacia difíciles de superar- provocó que ante la sinceridad de sus palabras, que no buscaron culpables, sino analizar la situación y ponerse a disposición del grupo para encontrar el camino más adecuado, ningún jugador dio un paso atrás eludiendo responsabilidades; todos los líderes, o los más experimentados, se manifiestan de una forma tan sincera y emocionante como cuando lo hacen en la pista.
Quizá lo que pudimos entrever en el cambio posterior es que Scariolo había claudicado de alguna manera en algunos de sus puntos de vista tácticos.
Yo lo que creo es que Sergio entró en la reunión como entrenador y salió como seleccionador y líder en el que todo el grupo depositó su confianza. A partir de ahí de ahí el nivel de concentración alcanzó su máximo nivel.
Y luego vino la rueda de prensa del día siguiente
Esa es a la segunda reunión a la que hacía referencia y es que todas esas sensaciones había que escenificarlas para que los millones de aficionados, a través de los medios de comunicación, fueran conocedores de cuál era la actitud del grupo, y fue el presidente José Luis Sáez, como responsable y líder máximo, quien junto a Navarro y Scariolo, convocó una rueda de prensa en la que los tres responsables de la familia dijeron que la situación era difícil, que no había ningún problema de convivencia y que los tres colectivos estábamos unidos por lo que el éxito o el fracaso lo afrontaríamos juntos.
Fue éxito
Fue éxito y yo creo que ees en ese momento, tras las dos reuniones, cuando el baloncesto español empieza a conseguir su primer oro europeo en categoría masculina.
Al margen de las mejorías médicas y del periodo de rodaje, lo cierto es que vimos a dos equipos bien distintos
Es que las lesiones nos generaron inestabilidad y la imposibilidad de desarrollar movimientos tácticos diseñados por Scariolo con la intensidad necesarias. Además, hay que decir que en nuestro grupo de la primera fase estaban las selecciones que luego serían segunda (Serbia) y cuarta (Eslovenia). Respecto al éxito final quiero recordar a los grandes damnificados, a los árbitros, y es que todos estos éxitos del baloncesto les imposibilita pitar finales que, por su categoría, tendría que arbitrar.
En ese éxito tuvo mucho que ver Pau Gasol, que asumió todas las responsabilidades habidas y por haber. ¿Qué significa Pau para esta selección?
Pau une dos aspectos: es un jugador de ámbito mundial y líder