Naia Fernández El partido arrancó con una España eléctrica. Aguerrida en defensa y muy acertada en ataque, con Torrens desenvolviéndose muy bien en el uno contra uno y Montañana muy efectiva. El 4-12 a los 3 minutos y medio de partido era una muestra clara de la superioridad española en los primeros compases. Rutenis Paulauskas detuvo el choque para despertar del letargo inicial de las suyas. Pese a los avisos de su técnico, a las lituanas les costó anotar en ataque pero en cuanto se dieron cuenta de que la mejor alternativa era darle balones a Ciudariene la ventaja española mermó. La ala-pívot del Celta anotó 8 puntos y sólo los dos triples de Elisa Aguilar evitaron que Lituania le diera la vuelta al marcador (18-22). Con gran dinamismo continuó el segundo asalto pero a España le faltó acierto bajo el aro para alcanzar rentas cercanas a la decena. Tampoco el trabajo defensivo fue tan intenso como el de los primeros minutos por lo que Evaristo Pérez llamó a capitulo a las suyas a los 15 minutos de juego con 31-33 en el electrónico. Para esas alturas las anfitrionas ya se habían metido de lleno en el choque y tres tiros libres de Valuzyte pusieron por delante a Lituania por primera vez en el choque (37-36, min.16). El seleccionador español recompuso parte del quinteto -volvió a poner en cancha a Palau y Torrens-, pero las locales estaban lanzadas, los triples de Stakneviciene no hallaron la respuesta necesaria por parte de España y un parcial de 11-2 llevó el 48-38 al descanso. En el tercer asalto la selección española volvió a ofrecer destellos de su juego partiendo siempre desde la defensa y asegurando el rebote defensivo para poder correr el contraataque. El marcador pronto reflejaría el esfuerzo de la ‘roja’ (53-49). Pero al combinado nacional le faltó consistencia y Lituania aprovechó tiros de media distancia para mantenerse por delante e incluso volver a situarse +8. Al final del tercer cuarto, 67-61. La selección española había reaccionado atacando bien la zona de Lituania, circulando con fluidez el balón y seleccionando buenos tiros pero ante el buenhacer español las anfitrionas endurecieron notablemente el choque contando además con la permisividad arbitral y España se equivocó más de lo habitual en el arranque del último cuarto. Llegó entonces la máxima diferencia en contra a falta de 7 minutos para el final (75-61). La ‘roja’ necesitaba anotar de manera imperiosa si quería tener opciones de ganar el choque. Torrens y Montañana, las dos jugadoras más acertadas en las filas española, aceptaron la responsabilidad y rebajaron la diferencia a los 10 puntos. Con 82-73 se entró al último minuto y medio de partido pero cuando España apretaba apareció Ciudariene para llevar la tranquilidad a las suyas, en un partido en el que Lituania firmó un 71,9% en tiros de dos y un 36,8% en triples. LITUANIA, 87 (18+30+19+20): Pacauskiene (5), Bimbaite (12), Ciudariene (18), Petronyte (14), Valuzyte (14) – cinco inicial- Zygelyte (-), Sauliute (6), Valentiene (5), Staugaitiene (-), Paugaite (-), Stakneviciene (13) y Rickeviciute (-). ESPAÑA, 77 (22+16+23+16): Nicholls (4), Palau (4), Aguilar (6), Montañana (20), Torrens (23) –cinco inicial- Lima (4), Abalde (2), Sánchez (4), Pascua (4), Valdemoro (-), Domínguez (4) y Cruz (2).