ÁREA COMUNICACIÓN FEB

A 7 décima del final y con el Bàsquet Girona uno arriba en el marcador, surgió el milagro en Artxanda para Bilbao Basket. Mikel Torre diseñó una jugada que sus pupilos ejecutaron a la perfección y dieron la victoria al equipo local gracias a una canasta espectacular. 
 
Fue Oier de las Heras el encargado de poner el balón en juego desde la banda. Los bloqueos en la línea de fondo funcionaron a la perfección y el envío milimétrico llegó a manos de Bingen Errasti. Y que de forma acrobática y de espaldas al aro se inventó un palmeo para llevar el balón al aro y ganar el partido antes de que se acabara el tiempo reglamentario.
 
El delirio se apoderó del pabellón y de todos los componentes de Bilbao Basket. Y no era para menos, porque la acción recordó a aquella canasta ganadora conseguida por Rudy Fernández con el Joventut frente al Unicaja en el Martín Carpena, allá por el año 2006 en partido de Euroliga. El palmeo de Errasti sirvió para que el equipo vizcaíno se estrenara en la competición y sumara su primera victoria de la temporada. 
 
La acción coronó el gran partido de Bingen Errasti, el base fue el máximo de su equipo con 17 puntos. También pudo aportar dos rebotes, dos asistencias y dos balones recuperados para un total de 13 créditos de valoración. Una gran actuación en la línea de su debut en la competición, en la que consiguió otros 15 puntos con un destacado 3 de 6 desde la línea de tres puntos. 
 
Bingen Errasti cerró así una gran semana a nivel personal, pues el pasado martes debutó en partido oficial con el Surne Bilbao Basket. Su estreno con el equipo dirigido por Jaume Ponsarnau se produjo en la FIBA Europe Cup, después de haber entrado en la dinámica del primer equipo ya en la pretemporada.