MANUEL DE LA TORRE / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

La Selección cerró su participación en el Eurobasket 2017, el último celebrado hasta la fecha, con una muy meritoria medalla de bronce después de vencer a Rusia (93-85). Un partido duro en el que hubo que luchar hasta el último minuto. Y, sin duda, un partido muy especial. Juan Carlos Navarro, el jugador con más internacionalidades (253) en la historia de la Masculina, tuvo una despedida acorde a su formidable carrera.

Juanqui dijo adiós desde el podio gracias, en parte, a las actuaciones de los hermanos Gasol (51 puntos sumaron entre Pau y Marc) y al descaro y magia de Sergio Rodríguez. Mucho más que un revulsivo. La salida a pista del base canario resultó fundamental para, primero, asegurar el dominio español y, ya en los compases finales, finiquitar el encuentro ante una Rusia que, liderada por el cañonero Shved (18 tantos) vendió muy cara su piel.

Puntos, dirección, frescura, anticipación… El ‘Chacho’ aportó lo mejor de sí en el partido decisivo. Con su talento y calidad marcando la pauta en ataque tanto para anotar (16 puntos) como para encontrar a sus compañeros (9 asistencias, su segunda mejor marca con España), su anticipación a la hora de defender (3 robos) permitió también un deshago extra.

En la previa, después de caer ante Eslovenia en semifinales, Sergio ya avisaba sobre el objetivo del equipo de Scariolo antes de abandonar Estambul: “Todo lo que tenemos en mente es lograr el bronce y quedarnos con buen sabor de boca". Su rendimiento en un choque tan complicado ante Rusia fue, sin lugar a dudas, determinante para que la Masculina conquistase una nueva medalla y despidiese con honores a Navarro.

Sus números en… 24 minutos
16 puntos
9 asistencias
3 robos
5/9 en tiros de campo (1/3 en triples)
5/5 en tiros libres
6 faltas recibidas
27 de valoración

Sergio Rodríguez con la Selección

Sergio es una de esas figuras sin las que resultaría imposible explicar los éxitos cosechados por el baloncesto español a lo largo de los tres últimos lustros. Con apenas 19 años recién cumplidos, el Chacho debutó como internacional absoluto en el Eurobasket 2005. Un aprendizaje que le ayudó a proclamarse campeón del mundo un año más tarde en Japón. Aquel fue la primera de sus siete medallas con la Selección. Una cuenta que asciende a ocho con el Oro en el Europeo Júnior de Zaragoza en 2005. Sergio Rodríguez, 145 internacionalidades, es pura creatividad y fantasía en una cancha de baloncesto.