Aquel 14 de agosto de 2009, Llull jugó 18 minutos y sumó 7 puntos, en un partido que España ganó con comodidad a Cuba por 94-57 en el Centro Insular de Las Palmas. Fue el primer paso de una carrera que en este decenio ha acumulado ya 132 partidos y 7 medallas, prácticamente a una por verano. La primera, aquel mismo año, el primer oro en un Eurobasket de la historia de la Selección.

Hoy, diez años después de su debut, Llull recuerda aquel partido y también que lo jugó con el dorsal número 18: “Después en el Eurobasket llevé el 12”, añade. De su larga trayectoria con la SEAM no se decide a destacar una medalla en particular, pero sí dice que “las dos medallas olímpicas fueron especiales” y si algún campeonato destaca por encima de otros es “el Eurobasket de 2015, la victoria en semifinales sobre Francia en la prórroga y la final contra Lituania”.

Desde su debut, en todos estos años, salvo cuando uno u otro no ha estado en el equipo, Llull ha compartido habitación con Marc Gasol. Y ahora, dos años después de perderse el último Eurobasket por culpa de una lesión, regresa al equipo con la ambición de luchar por lo máximo en la Copa del Mundo en China.