Ejerciendo como el único superviviente de aquellas plantillas que hicieron grande al RETAbet Bilbao Basket década y media atrás, el base y capitán Javi Salgado representa en los días previos a la final la ilusión de toda una ciudad a la hora de poder celebrar un nuevo título. Para ello, el bilbaíno deberá liderar a los suyos en una noche en la que el ansiado lugar en la historia pasará por un histórico triunfo a domicilio ante el equipo más en forma de la competición.
PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Muy lejanas quedan ya en tierras bilbainas aquellas imágenes que inmortalizaron a su hoy RETAbet Bilbao Basket como campeón de Copa en la Liga LEB Plata liderados sobre la pista por un Javi Salgado que comenzaba a hacerse un nombre en esto del baloncesto. Un jugador que fue uno de los primeros en apuntarse al nuevo proyecto de los hombres denegro justo cuando más lo necesitaba su equipo a lo largo de un verano de incertidumbre tras un doloroso descenso.
Es por ello que no habrá nadie mejor que él a la hora de valorar cómo latirá el corazón de su equipo en la noche más esperada de la temporada: “Llegara jugar una final siempre es un reto complicado y por eso este tipo de partidos hacen tanta ilusión a los jugadores. Desde principios de temporada nuestro objetivo fue el poder vernos en partidos como este pero ya no sólo por nuestra ambición profesional sino especialmente por nuestra afición ya que ellos están viviendo esta temporada con mucha pasión y se merecen más que nadie el poder disfrutar de nuevo con el baloncesto y el poder ver a su equipo en lo más alto”.
Y eso que el camino no ha sido sencillo ya que, para poder alcanzar esta final, el equipo ha tenido que superar con nota una exigente primera vuelta: “La Liga LEB Oro es una competición muy dura y exigente y por eso creemos que hay que darle el valor que se merece a esta final. A lo largo de la temporada todos hemos tenido que acostumbrarnos a lo que supone el día a día en esta competición, incluido yo que ya la conocía, pero creo que la respuesta del equipo ha sido muy buena para poder despuntar en una liga exigente y súper igualada en la que cualquiera puede ganar a cualquiera”.
De este modo, el conjunto vasco viajará el sábado a Sevilla dispuesto a imponer su estilo de juego ante un RealBetis EP que es en estos momentos el equipo a batir pero al que están dispuestos a superar a base de trabajo: “Ellos tienen un equipo muy completo, con muchísima calidad en todos sus puntos y con un juego interior súper potente. A todo eso hay que unirle que juegan en su casa y que llegan en un gran estado de forma lo que podría llevarnos a pensar que todo está predestinado para que sean campeones pero si algo está claro es que nosotros somos capaces de competir con cualquiera y más a 40 minutos. En algún momento tienen que perder así que viajaremos con el deseo de que demostrar que queremos ganar esta final”.
Así, el base bilbaíno culminaría uno de los deseos que le llevaron a permanecer esta temporada en la disciplina del equipo: “Uno de los alicientes que tenía esta temporada para mí y por los que he seguido jugando con el Bilbao Basket fue para poder jugar partidos como este. Quería pelear para poder jugar finales y competir para poder ganar títulos así que me haría mucha ilusión como capitán el poder levantar la Copa para dedicársela a toda esa gente de Bilbao que nos ha acompañado en todo este tiempo y que durante los dos últimos años no hatenido muchas alegrías. Ellos merecerán cada esfuerzo que podamos hacer en esta final”.