PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Igualdad, emoción y un vibrante final en el que cualquiera pudo haber logrado el pase a semifinales. El encuentro inaugural de la Copa de la Reina lo tuvo prácticamente todo en una tarde de jueves en la que el Spar CityLift Girona tuvo que trabajar duro para poder imponerse a un Valencia Basket que controló el marcador durante un buen número de minutos pero al que le faltó acierto en los momentos claves de partido. Especialmente cuando la bandeja con la que Anna Gómez pudo haber forzado la prórroga no encontró el camino del aro.


Valencia Basket muestra sus armas en un completo inicio (14-16)

Tenía claro el Valencia Basket que su duelo de cuartos ante el Spar CityLift Girona no iba a ser ni mucho menos un encuentro sencillo pero, por si hubiera alguna duda, así se encargó de recordárselo su rival durante los primeros compases de un encuentro en el que las de Rubén Burgos necesitaron de algo más de dos minutos para convertir sus primeros puntos de la tarde. Eso sí, cuando estos llegaron, las jugadoras del conjunto taronja parecieron recibir una dosis extra de confianza que inspiró a María Pina a la hora de mover el balón a a través de la línea exterior así como a una Tinara Moore que generaba las primeras dudas en la defensa gerundense (10-13). Tiró Eric Surís de tiempo muerto  para intentar pulir, a base de pizarra, las primeras imprecisiones de su equipo pero la fortuna en el lanzamiento parecía no estar del lado de un equipo muy alejado de su habitual versión ofensiva. Y es que ni el debut de Williams pudo inspirar a un equipo que se mantuvo únicamente a rueda de su rival gracias al juego generado por Nadia Colhado durante el tramo final del primer cuarto (14-16).


La escopeta nacional coloca al Uni Girona por delante (14-11)

Había logrado el Valencia Basket secar el ataque de su rival durante un serio primer cuarto y eso pareció motivar a un Spar CityLift Girona que regresó a pista mucho más metido en partido. Dispuestas a recuperar el mando en el electrónico, las de Eric Surís apretaban en defensa y aseguraban en ataque buscando la mejor opción de tiro para cerrar un pequeño parcial (6-0) que parecía todo un mundo a tenor de cómo se estaba desarrollando el encuentro (20-16). Sorprendía el Uni Girona al contraataque pero no así en estático donde las acciones de Dongue chocaban una y otra vez con el buen trabajo de las pívots valencianas quienes lograban así que el partido no se complicara para sus intereses mediado el segundo cuarto (20-18). Restaban cinco minutos para alcanzar los vestuarios y era momento de apretar sumando al juego los primeros lanzamientos exteriores con los que Rosó Buch y María Pina sacaron a relucir "la escopeta nacional". Trató de romper el equipo "local" con un pequeño parcial de 5-0 a su favor pero de poco sirvieron los esfuerzos de las locales ante un Valencia que supo sacar una dosis extra de orgullo para no echar así por tierra el buen trabajo realizado a lo largo de 20 minutos impecables. La bocina sonaba y la igualdad renovaba sus votos de cara a la segunda parte (28-27).


Rosó Buch lanza un aviso con carácter psicológico (15-15)

Con el control de las pérdidas de balón como asignatura pendiente, las de Rubén Burgos regresaron a pista conscientes de sus posibilidades. Habían sido capaces de mirar cara a cara a todo un conjunto de Eurocup y ese fue el mejor impulso moral para ellas con el comienzo del tercer cuarto. Así, el equipo valenciano pudo asumir el mando de partido durante algunos minutos en los que controlaron el juego a través de su trabajo al contraataque. Supo correr el Valencia Basket y eso no le sentó bien al juego de un Spar CityLift Girona que tuvo tirar de calidad exterior para romper en estático con Shay Murphy ganando peso desde la línea de 6,75 (37-37). No bajó los brazos el equipo valenciano intentándolo una vez tras otra pero encontrando siempre la misma respuesta en su rival. Valencia anotaba, Girona respondía y así una y otra vez. Pese a ello, el debutante en la competición logró completar un soberbio cuarto en el que tan sólo cedieron el mando cuando Rosó Buch decidió que había llegado el momento de invertir la suerte de su equipo. Así, con un lanzamiento sobre una pierna, la jugadora catalana puso a su equipo por delante a falta de tan sólo un segundo para el final. Todo un aviso de cara a un final de partido que iba a ser decisivo (43-42).


La vieja guardia cierra el partido con  (9-7)

El triunfo estaba en el aire y, en ese ambiente de presión en el reloj agotando poco a poco sus minutos, el Spar CityLift Girona pareció sentirse un poco más cómodo. Un reto reservado para las jugadoras más valientes y que siempre resulta un poco más sencillo cuando cuentas en tus filas con una jugadora de la talla de Laia Palau. Y es que ese fue el nombre más destacado de un último periodo en el que sus puntos mantuvieron a flote al equipo catalán pese a que la fortuna no terminaba de acompañar al equipo de cara al aro. Con Valencia Basket errando tiros importantes, las réplicas de las de Eric Surís no encontraban el camino deseado. Es más, ni las acciones generadas a través del rebote ofensivo fueron suficientes para poder ampliar el estrecho margen con el que se llegó a los tres últimos minutos finales (48-46). Había inquietado Palau a su rival pero el zarpazo definitivo llegarás desde tan sólo unos centímetros más a la derecha con el acierto de una Shay Murphy que anotó el triple clave. Valencia Basket buscó un último intento confiando en el talento de una Anna Gómez que marcó los tiempos a la perfección pero la bandeja generada por Anna Gómez no encontró el aro diciendo así adiós a sus opciones. La moneda mostraba su cruz y, con ello, el Valencia Basket se despedía de una Copa en la que las gerundenses pasaban ronda no sin apuros (52-49).