PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Sea en la categoría que sea y perteneciente a la disciplina que sea, un encuentro contra la Selección de Serbia no resulta nunca una empresa sencilla y, ni mucho menos, cuando lo que hay en juego resulta tan sumamente atractivo como puede ser el pase a las semifinales del Europeo U16. 

Un reto tan complicado como atractivo por el que la Selección de David Soria peleó ya desde el salto inicial de un encuentro que no destacó precisamente por su belleza durante los primeros compases. Y es que, los habituales minutos de tanteto del choque y del rival, vinieron acompañados de un profundo respeto mutuo que hizo que el marcador necesitara de algunos minutos para elevar sus guarismos. Entre medias, el blaugrana Borja Fernández aportaba solidez a España bajo los aros con dos buenos rebotes defensivos con los que cerró el camino al aro a su rival. Serbia se anotaba los primeros puntos del choque y España tan sólo podía sumar a través de un lejano lanzamiento durante los 4 primeros minutos (8-3) pero la rápida reacción de los de Soria espoleados por su técnico desde la banda desembocó en un parcial de 0-5 con el que igualar el marcador (8-8). España tiraba de acierto exterior para impedir que Serbia se distanciara pero el buen hacer del rival desembocó en un nuevo parcial con el que adquirir una cómoda renta ante un conjunto nacional al que le fallaba la muñeca desde el 4,60 (20-11).

Con dos acciones consecutivas al comienzo del segundo cuarto, la Selección de Serbia logró dar un nuevo paso al frente obligando a España a tirar de orgullo para poder recuperar su esencia. A través de varias buenas defensas consecutivas el equipo español lograba frenar el acierto anotador del rival llevando a su seleccionador a solicitar un tiempo muerto en el que David Soria aprovechó para corregir las primeras imprecisiones del cuarto (24-14). De este modo, España regresó a la pista con una nueva marcha en su juego y dispuesta a imprimirle velocidad al partido pero la fortuna de cara al aro no acompañaba del todo y Serbia lograba mantener intactas sus ventajas (28-17). Fue un 2+1 de Marc García el que permitió a España atravesar sus mejores minutos en el partido llegando a reducir las diferencias hasta los seis puntos. Serbia logró reacerse y recuperar su dominio pero de nuevo la intensidad española permitió alcanzar los vestuarios con un -6 que ejercía como la mejor recompensa al trabajo del equipo durante el segundo acto (39-33)

No había sido una primera parte sencilla y, por tanto, el segundo tiempo auguraba una dura batalla que comenzó librándose bajo los aros de ambas selecciones durante unos primeros compases en los que España demostró que podía hacer mucho daño a su rival por ese camino (42-38). Con el equipo dispuesto a dar un zarpazo en el marcador, Serbia comprendió a la perfección cómo debía alejar a España de los aros optando por una defensa zonal que pareció dar sus frutos con un parcial de 8-2 a su favor ante un equipo que se atascaba en el tiro exterior (50-40). Pese a ello, España no bajó los brazos y tiró de constancia ante una Serbia que seguía creciendo, en esta ocasión desde el tiro exterior para obligar a David Soria a parar el partido (53-40). España lo intentaba de todas las maneras posibles pero el encuentro parecía complicarse por momentos ante una Serbia para la que el marcador reflejaba la máxima del partido a poco más de un minutos para el final del tercer cuarto (+18 / 63-45).

Con viento de cola a su favor, la Selección de Serbia trató de romper el encuentro con una serie de acciones consecutivas encontrando el aro español pero el acierto exterior pareció concentrarse para los nuestros en los primeros compases de un último periodo en el que dos dianas consecutivas ayudaron a reducir notablemente las diferencias (72-59). Pero sin lugar a duda no era el día de una Selección Española que lo puso todo sobre la pista pero a la que le faltó la suerte de los campeones, aquella con la que sí contó una Serbia que neutralizó muy pronto el intento de remontada nacional para terminar cerrando a su favor un encuentro que apartó a España de la lucha por las medallas (82-73)

Así, el equipo peleará ahora por la quinta plaza de un campeonato de Europa en el que España podría garantizar su presencia en el Mundial U17 del próximo verano de 2018. Para ello será imprescindible el poder ganar los dos próximos encuentros.