ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Este grupo de jugadoras que dirige Miguel Ángel Ortega llegan al Europeo U18 con un bagaje competitivo amplio, tanto en campeonatos de España, en Europeo U16 donde fueron Bronce y con experiencias ya en baloncesto adulto, se presenta en Sopron con máxima ambición y dispuestas a todo desde el primer día. Bastaron unos minutos para que encontraran su ritmo adecuado, para que pusieran en marcha esa intensidad defensiva que se transforma en velocidad para buscar el aro contrario. Desde el final del primer cuarto (19-16) España puso en práctica ese juego asociativo que le ha caracterizado en la preparación, con esfuerzo máximo en defensa y generosidad en el pase. “Zeta” y González se mostraron eficaces y con ella Alonso para conseguir despegarse en el marcador en la segundo cuarto con nuestra selección convertida en rodillo capaz de colapsar al rival, recuperar balones con facilidad anotar desde las situaciones de ventaja. El 9-24 de parcial en ese periodo llevó el marcador a un contundente 25-43 al descanso con el partido claramente encaminado a una primera victoria española. En esa fase Ginzo se había convertido en referente ofensivo.

Y como ya ha sucedido en varios partidos de la preparación, esa intensidad puntual en unos minutos impresionantes le dio a España una renta que, cuando el ritmo decreció le permitió mantenerse por encima en el marcador con ventajas relativamente cómodas (49-63 en el minuto 30). Pero en el último cuarto el partido dio  un giro inesperado, con Serbia encontrando los caminos al aro que no había conseguido antes y con un parcial de 12-1 acercándose peligrosamente en el marcador con Katanic como protagonista en esta fase. Un partido completamente nuevo, con un marcador ajustadísimo (65-67, minuto 38), con un final de máxima emoción, con Ortega apurando los tiempos muertos para intentar serenar los ánimos de una jugadoras sorprendidas por  el inesperado, unos minutos atrás, desenlace. Cáceres asumía responsabilidad en los momentos claves, y con ella Ginzo y las nuestras recuperaban el aliento y la inspiración en último minuto (0-10 de parcial) dejando sólo en susto la remontada serbia. España sumaba su primera victoria, eso sí, recibiendo una seria advertencia de lo que puede ser y será el campeonato.