Si hablamos de Easo Loquillo, de las primeras palabras que nos vienen a la cabeza, una es juventud. Un grupo de 12 jugadores que apenas superan los 21 años de media, pero que tiene una amplia experiencia en la Liga EBA. Pocos conjuntos en esta categoría podrán bajar esta increíble cifra.
Diez de los doce jugadores que forman la plantilla para esta temporada 2016-2017 ya estaban el curso pasado en el equipo blanquiazul. Pero no queda ahí la cosa. Once de los doce jugadores han sido formados en el Easo SBT. La gran mayoría, sus primeras experiencias con el baloncesto fueron en la escuela del Club.
Para Easo Loquillo esta es su sexta temporada en la cuarta liga nacional. Manex Eizmendi (1992), el capitán, formó parte del grupo que consiguió el histórico ascenso a la Liga EBA. Junto a Eizmendi, Iñaki Nagore (1991) e Iker Arrieta (1992), son los tres jugadores más veteranos dentro de esta joven plantilla, sumando entre los tres más de 40 años en el Club. Un equipo que ya ha disputado dos fases de ascenso a LEB Plata y ha estado muy cerca de alguna más.
Easo apuesta por jóvenes jugadores que vienen trabajando desde muy pequeños en las categorías inferiores del Club y pese a su corta edad, aportan mucho al equipo. Es el caso de Asier Azpeitia (1998), Mikel Sanz (1999) y Xabier Beraza (1999). Tres jugadores que llevan destacando notablemente en las últimas temporadas, con grandes actuaciones en los campeonatos de España.
Sobre la veintena de edad andan Iñigo Sarasola (1995), Jon Urtxulutegi (1996) y Aritz Ibarloza (1996); los tres junto a Azpeitia son jugadores vinculados y entrenan con el Gipuzkoa Basket de LEB Oro, donde Urtxulutegi ya ha debutado en competición oficial. Mikel Esnaola (1994), volvió el pasado mes de febrero tras tres temporadas lejos de su casa. Jon Odriozola (1997), ha sido el último en entrar, el joven base donostiarra vuelve a Easo después su primer año senior.
Gotzon Arrieta, veterano entrenador donostiarra, dirige desde hace siete temporadas a este fantástico grupo que tanto está dando al Easo SBT. Grupo en el que Iñigo del Valle (1987), es el único jugador que no ha sido formado en la base del Club, pero lleva 4 temporadas aportando mucha calidad y experiencia al equipo, además de ser un ejemplo de compromiso y esfuerzo.
Sin ninguna duda, un equipo al que mirar con muy buenos ojos y en el que se refleja todo el trabajo que viene haciendo el Easo SBT durante sus 25 años de historia. Un equipo sostenido en el buen trabajo con la base del baloncesto donostiarra, siempre buscando la formación íntegra del jugador tanto en el aspecto deportivo como fundamentalmente en el humano. Habrá que estar muy atentos a lo que haga Easo Loquillo, que un año más buscará estar entre los mejores de la Liga EBA, porque de las canteras españolas, sin ninguna duda, ya lo está.