PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Hablar de Edu Hernández-Sonseca son palabras mayores en una Liga LEB Oro a la que el center madrileño llegó cuatro años atrás con una vitola de estrella que ha mantenido, a base de trabajo, durante su periplo en una competición en la que está a punto de jugar su primera final de Copa.

Un título al que optará junto a su Melilla Baloncesto tras una primer vuelta en la que el equipo fue creciendo con el paso de las semanas hasta certificar su pase en la penúltima jornada de la primera vuelta: “Habíamos comenzado la temporada con una serie de objetivos y uno de ellos era el de poder intentar meternos en la Copa Princesa de Asturias. Sabíamos que no iba a ser sencillo y de hecho se nos llegó a complicar un poco durante el tramo final de la primera vuelta pero el destino y la constancia hicieron que lo que en un principio parecía un imposible se convirtiera en una realidad que nos ha hecho a todos una especial ilusión”.

Un pase como segundos que les llevará a pelear por el título a domicilio en una complicada pista en la que ya saben lo que es vencer esta temporada, todo un reto para el que tratarán de convertir el factor ambiental en un punto a su favor: “Quizá en esta ocasión ese factor pista que casi todo el mundo cataloga como algo que jugará en nuestra contra pueda convertirse en un punto a nuestro favor. El tener que buscar un título en tu casa, ante tu público y con todo de cara puede llegar a pesar y permitirnos que podamos tener algo de ventaja en un encuentro al que llegamos sin presión alguna y con el deseo prioritario de disfrutar sobre la pista para poder ganar”.

Para ello, el jugador interior tiene más que claro qué deberá hacer su equipo durante los 40 minutos de un encuentro en el que deberán llegar con vida a los instantes finales: “Tenemos un precedente importante con el partido que disputamos ya allí en Liga pero en esta ocasión todo será muy diferente ya que intuimos un partido muy igualado… Somos dos equipos buenos en defensa y bastante efectivos en ataque lo que podría hacer que uno u otro pudiera ir rompiendo el partido si el rival no consigue aguantar ese ritmo. Si eso sucede en nuestra contra no debemos perder la fe porque esta temporada hemos demostrado que somos capaces de remontar los encuentros más complicados pero si logramos aguantar y llegar igualados al final de partido creo que podemos tener muchas opciones”.

Un duelo que han preparado de manera intensa durante los últimos días sin varias un ápice su metodología de trabajo: “Es una semana más con una dinámica de trabajo idéntica a cualquier otra en la que hayamos jugado también en viernes. Sabemos que en esta ocasión el ganar es importantísimo por el título en sí y por el premio que puede llegar a tener de cara a un hipotético playoff en el que te asegurarías el factor cancha a tu favor en todas las eliminatorias por eso sería muy poco inteligente el variar cualquiera de las rutinas que durante todo el año tan bien nos han funcionado para llevarnos hasta aquí”.

De este modo viajarán a Palencia para afrontar un encuentro para el que el concepto equipo ejercerá como la clave para el conjunto que se lleve finalmente el triunfo: “Quien hable de Marc Blanch, de Hernández-Sonseca o de cualquier jugador se equivoca porque este va a ser, más que nunca, el partido de los equipos… Yo no he ganado ningún partido sólo sino que ha sido por el trabajo de todos los compañeros, cuando ganamos lo hacemos todos y cuando perdemos exactamente lo mismo. Nosotros simplemente llegamos al partido con la mayor ilusión del mundo y con el deseo de ayudar para poder hacernos con una Copa que es un bonito reconocimiento que supone mucho para la ciudad de Melilla”.