El éxito suele estar condicionado por como afrontamos la decepción. Por la capacidad de reacción ante la adversidad. Hace apenas dos meses la Selección Absoluta perdía ante Francia las semifinales del EuroBasket de Hungría. Cuando hablamos de jugadoras poseedoras del gen de la competitividad la final de consolación –con la que otras sueñan- puede convertirse en el reto más complicado. Pero hay que levantarse como hizo la selección que capitanea Laia Palau, quien no ha dudado en enviar un vídeo de ánimo a las jugadoras que aspiran a formar parte de la Senior algún día.

Los paralelismos entre estas dos selecciones -Senior y U16- me llegan a la cabeza con claridad. Si las chicas de Mondelo lograron en Hungría la clasificación para el Preolímpico tras una victoria increíble ante Montenegro, las U16 lograsteis el billete deportivo al Mundial U17 derrotando a la poderosa Rusia. Pero ambas queréis más.

Tras la decepción de la semifinal viviréis las mismas sensaciones y ansiedades que ellas antes del partido final. También tenéis una baja más que significativa –Iris Junio- y tampoco os habéis escudado en ella, igual que nadie nombró a Sancho Lyttle durante el campeonato. Lo que habla del carácter que os une.

En estos momentos el grupo es el que debe permanecer unido para buscar en su interior la fuerza común que os ayude a superar los momentos complicados, que los habrá. Italia era la gran favorita al Oro y estará viviendo un proceso similar al nuestro por lo que el partido será emotivo y duro. El papel de jugadoras como la capitana Paula Valiño está resultando fundamental como aglutinadora, un calco al trabajo realizado por la campeona de Europa Laia Palau, referente anímico de las mayores.

Ya habéis demostrado vuestra capacidad para levantaros. Las derrotas ante Hungría y Francia dolieron, pero fuisteis capaces de sobreponeros y llevar al equipo a la victoria en cuartos. Ahora afrontáis un reto similar ante Italia, igual que pasó en Hungría con el partido por el Bronce frente a Bielorusia. Recordad que, como entonces, una medalla no se gana en en el primer minuto de un partido ni una carrera se gana en la primera vuelta. Sino que hay que disputar los cuartenta minutos o aguantar las cuarenta vueltas con la máxima concentración para conseguir el objetivo.

Hoy no se juega sólo el último partido del Europeo U16 sino que debéis considerar el reto como el primer paso del Mundial U17 que, además, disputaréis en España el próximo verano. El buen trabajo del equipo biomédico os ha permitido afrontar en perfectas condiciones este esfuerzo final. Cuando empiece el partido estad seguras de que todos los que os acompañamos, familiares y aficionados -sobre todo los de Langreo-, sólo podemos sentir orgullo por vuestro comportamiento. Disfrutad y pelead durante los 40 minutos. Habrá cosas que no saldrán perfectas pero estos partidos suelen dominarlos las más fuertes mentalmente.

Por último me gustaría que entendiérais que el éxito o el fracaso no se mide por un resultado aislado sino por la sensación, cuando se apagan las luces del pabellón, de que dejasteis toda vuestra voluntad y energía en la pista para dar el máximo. Ese es el camino.

ANGEL PALMI