ADECCO PLATA J. 18
Blair & Zamora, golpeadores sobre la bocina
1/28/2015 - 11:06 AM
En el denominado ‘clutch time’ dos figuras han emergido esta semana en la Adecco Plata: Garfield Blair y Néstor Zamora. El escolta del Marín y el base del FC Barcelona sentenciaron sobre la bocina con dos ‘triplazos’ ganadores. Sangre fría y muñeca caliente la del jamaicano y el catalán. Fueron sin duda los dos golpes más espectaculares de la última jornada. Para recordar.
XAVI OLTRA / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
A 14 segundos del final el histórico Alberto ‘Chufi’ Rodríguez forzaba el empate a 59 y el tiempo muerto del técnico local, Javi Llorente, en el trepidante final disputado en el polideportivo de A Raña entre los dos equipos gallegos de la categoría. Un derbi más que especial, porque este año se cruzaban los dos conjuntos empatados a victorias en la clasificación y con el ‘average’ particular en juego. Una mínima ventaja que era de dos puntos para los locales, ganadores en la ida (76-78). Llorente, pizarra en mano, diseño un movimiento para que el jamaicano Garfield Blair se la jugara en la parte alta de la botella.
TRIPLAZO FRONTAL GANADOR DE BLAIR, DE SIETE METROS SOBRE LA BOCINA
Blair recibió pero tuvo que recular ante un dos contra uno y ceder el balón a su compañero Rogers. Mientras los segundos se hacían eternos pero a la vez caían irremediablemente hacia el vacío del final, la circulación de balón tras los ajustes defensivos dio una nueva oportunidad a Blair, a más de siete metros del aro, en la parte frontal. El escolta no dudó y consiguió un ‘buzzer beater’ de escándalo, anotando un ‘triplazo’ ganador sobre la bocina. Éxtasis en A Raña y triunfo de Marín Peixegalego sobre el eterno rival Xuven Cambados tras un auténtico partidazo. Un imborrable encuentro, que tuvo en Blair a su gran protagonista tras anotar 23 puntos, con una brutal serie de 6/7 en triples. El último, el de la victoria.
“SENTÍ QUE EL BALÓN PODÍA ENTRAR”
“Me gusta hacer el último tiro del partido. Me siento con confianza en esas situaciones. Contra Cambados, honestamente no sentía que fuera a poder hacer el último tiro después que ellos cambiaran la zona. Yo sólo intenté sacarme los dos defensores que tenía y encontrar un compañero abierto. Una vez pasé el balón y lo volví a recibir ya tenía sólo un defensa. Entonces estaba seguro que iba a hacer el tiro correcto. Una vez la bola salió de mi mano sentí que tendría suerte y que el balón podía entrar. Toda la gloria es para mis compañeros por creer en mí y darme su apoyo en los últimos tiros de partido. La afición y los dos equipos tienen rivalidad y era un partido que esperábamos jugar hace tiempo”, resume Garfield Blair, que prefiere compartir los honores con el resto del vestuario tras volver a imponerse en un derbi gallego.
LOS GALONES DE ZAMORA, A ESCENA
No menos meritorio y espectacular fue el ya histórico triple logrado por el veterano Néstor Zamora en las filas del FC Barcelona. El choque también transportaba cierto grado de tragedia, ya que era un enfrentamiento directo entre rivales de la zona baja, que huyen del descenso. Y también con el ‘average’ particular en juego. Los catalanes se habían impuesto en la ida en la prórroga por sólo dos puntos (91-89). El igualado y tenso choque caminaba irremediablemente el pasado domingo en Pla de Na Tesa a un final agónico. El base San Emeterio ponía por delante a los locales (59-58) a poco del final. Era Aleix Durán el que tenía que parar el partido y tirar de pizarra en los últimos 11 segundos, con la posesión para el Barça.
TRIPLE GANADOR PARA EL BASE AZULGRANA
A un segundo del final y con el pabellón mallorquín celebrando casi el vital triunfo local llegó la bomba de Zamora. El ex Cornellá, ex Andorra y ex Araberri sentenció con otro ‘triplazo’ ganador, sólo al alcance de jugadores sobrados de carácter. El pequeño director de juego culé le devolvió la moneda a su homónimo en las filas contrarias, anotando la canasta decisiva. El postrero intento del alero local Sergio Rodríguez ya fue estéril… Zamora acabó con cuatro asistencias, cuatro rebotes, siete puntos y 1/3 en triples. Desde 6,75 sólo anotó una canasta. Pero la importante. La de un triunfo, que da ahora tres victorias de margen más el ‘average’ para el conjunto azulgrana respecto a los isleños, los cuáles marcan la franja del descenso. Un interesante colchón… gracias a Zamora.
“LA METÍ CON UN POCO DE SUERTE POR TABLERO. FUE UN SUBIDÓN”
“En el tiempo muerto, Aleix organizó una jugada para que yo jugara un bloqueo directo y decidiera. La defensa cambió y Ausina se quedó conmigo. Di un paso atrás y tiré. La metí, eso sí, con un poco de suerte porque entró por tablero”, relata Néstor Zamora. “Aún quedaba un segundo. Me controlé hasta que acabó. Ellos tuvieron una última opción, que podría haber entrado. Fue un partido a cara y cruz”, añade el director de juego catalán. “El equipo está ahora en una dinámica positiva. Nos merecíamos encadenar victorias. Era un partido muy importante, en una pista difícil y ante un rival directo. Los chicos y yo estábamos muy contentos al final”, asegura el experto base, que ya ha vivido alguna experiencia similar: “En Andorra recuerdo un par de canastas y alguna en Cornellá. Pero de este tipo, con un triple por tablero, ninguna. Fue un ‘subidón’”. “La verdad es que son muchos años en la categoría y si el entrenador vuelve a confiar en mí para la última bola, encantado. Aunque tenemos jóvenes de mucho carácter. Sulejmanovic ya metió la canasta ganadora en Vitoria”, finaliza Zamora, que celebró con sus jóvenes compañeros un triunfo vital y agónico.