POR JOSÉ LUIS SÁEZ

Alemania, Serbia, Turquía, Italia e Islandia serán los rivales en la primera fase del EuroBasket del próximo verano. Una cita siempre importante en el calendario de nuestros colores, pero doblemente valorizada en esta ocasión por cuanto –como ocurre cada cuatro años- también estarán en juego, además de las medallas del propio campeonato, gran parte de las posibilidades de participar en los Juegos Olímpicos.

A la hora de echar la vista atrás hacia los últimos EuroBasket, es evidente que España es la gran referencia. En una década y media nuestra Selección ha conquistado más medallas que ninguna otra, ha estado en el podio en siete de las ocho últimas ediciones y en todas como mínimo en semifinales.

Un palmarés que se explica por el talento y la calidad deportivas, pero también por el compromiso y el espíritu de todos los jugadores que han vestido la camiseta desde aquella plata de 1999 en París. Un compromiso y un espíritu con el que todos nos identificamos, del que todos nos sentimos orgullosos y que ha sido y sigue siendo motivo de sana envidia más allá de nuestras fronteras.

Al igual que ante otros campeonatos y como cada verano, queremos que el objetivo sea de nuevo el máximo posible. Y para ello, aunque todavía a unos cuantos meses vista, nos gustaría contar con la mayor disponibilidad, tanto por parte de jugadores como de entrenadores capaces de coger el testigo en el puesto de seleccionador.

Lo que sí podemos garantizar hoy por hoy, cuando estamos viviendo los últimos días de este 2014, es que el próximo verano lo afrontaremos una vez más, independientemente de los resultados más recientes, con toda la ilusión. Una ilusión que en gran medida nos inyectan jornada a jornada nuestros jóvenes jugadores, que siguen demostrando que cuando tienen la oportunidad de competir lo hacen al máximo nivel. Esta semana ha sido la de la explosión de Billy Hernangómez, pero semana a semana destacan hombres como Abrines, Rabaseda… jóvenes que están ya a sólo uno o dos pasos de ser protagonistas del futuro inmediato.

Pero no sólo la Selección masculina apuntará hacia Brasil 2016, también las chicas en su Europeo. Un reto que arrancará el Sopron, que será una vez más el encargado de abrir el verano internacional -en esta ocasión, con el recuerdo de la reciente medalla de plata Mundial- y tras el que llegará el turno europeo de las U20, U18 y U16, y el mundial de las U19, masculinas y femeninas.

Diez selecciones que volverán a ser el referente de nuestro baloncesto, nuestra identidad y nuestra competitividad y talento. Los valores que encarnan todos nuestros equipos y que en las últimas semanas han valido, en especial a las Selecciones Femeninas, unos reconocimientos más que merecidos.

Los de esta pasada semana en los Premios Nacionales del Deporte, para todas las campeonas de Europa en 2013 en general y para Ángela Salvadores en particular, han dado la medida de la repercusión que son capaces de alcanzar los éxitos de las chicas.

Mi felicitación a todas ellas y nuestro agradecimiento a todos quienes verano a verano forman parte de nuestras Selecciones y hacen posible que se cumplan tantos sueños.