MIGUEL PANADÉS / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

ILUSIÓN con mayúsculas, como no puede ser de otra manera ante una edición especial y en la cual se ha volcado un club como es el AESE y el ayuntamiento de L’Hospitalet y con ellos toda una legión de voluntarios entre los entrenadores, los directivos y personal de una entidad que abraza varios deportes pero que tiene en el baloncesto una dedicación excepcional con 30 equipos y una escuela con cien niños y niñas iniciándose en nuestro deporte.

ILUSIÓN por volver a recibir a los mejores jugadores infantiles de toda España con presencia de las mejores canteras como son las del Real Madrid, Barcelona, Joventut, Manresa, Sant Josep de Badalona, CB L´Hospitalet, una que representa el baloncesto menos conocido pero fundamental como es la del club anfitrión, el AESE y, este año, con la participación de la Selección Española OT (Operación Talento). Se da la circunstancia que la selección española que dirigirán Antonio Sierra y Alfredo Riera que no podrá contar con varios de los jugadores llamados a ser internacionales en el futuro al jugar éstos con sus clubes dando así lugar a que otros jugadores, seguidos por el área de detección de talentos de la FEB, tengan la oportunidad de enfundarse la camiseta de España y demostrar sus indudables capacidades.

ILUSIÓN por disfrutar de tres intensos días de baloncesto, que llenarán las gradas de un pabellón de aficionados, familias, jugadores, entrenadores, algún representante con ganas ya de “guiar” prematuramente los destinos de los más pequeños, ojeadores y muchos, muchos amantes del baloncesto en estado puro, del baloncesto exento de corsés tácticos y donde la inspiración individual destaca por encima de otros aspectos colectivos.

ILUSIÓN por aprovechar el torneo para realizar una actividad que permita a los entrenadores reunirse y debatir sobre aspectos de la formación, para escuchar a los más expertos, para contrastar opiniones y llevar a cabo esta costumbre fundamental en el aprendizaje como es la de hablar y escuchar sobre baloncesto, la de transmitir experiencias propias y contrastarlas con las ajenas con el único fin de que mejorar, entendiendo que esta mejora beneficia a los jugadores en formación.