Como no podía ser de otra manera la puesta en escena del partido fue de dos selecciones entregadas en cada ataque y defensa, intensas, agresivas y a también talentosas. Duelos individuales fabulosos en el perímetro y, dentro de la pintura, unos duelos en lo más alto con Astou peleando ante la fortaleza de las pivots galas. Las primeras ventajas, francesas aunque con unas sensaciones positivas para nuestro equipo ya España daba la sensación de tener guardada una marcha más. 15-20 para Francia.

VARIABLES TÁCTICAS DE COLINAS

Entre las muchas virtudes españolas encontramos su capacidad táctica, las propuestas continuas de cuerpo técnico y la capacidad de las jugadoras para llevarlas a cabo con eficacia. Leticia Romero sabía imprimir el ritmo adecuado y la defensa zonal, ajustando perfectamente para frenar las jugadoras más importantes francesas. Elena, Yaiza, Ariadna, Belén… nombres propios de una España que se iba encontrando cada vez más  a gusto y llegaba al descanso con ventaja mínima pero significativa. 27-26.

EL PARTIDO SE COLAPSA

Los argumentos españoles en el tercer cuarto se basaron con demasiada exclusividad en la aportación ofensiva de Astour. Francia aceptaba el reto de intensificar la defensa de perímetro aunque ello le significase encajar canastas en la pintura. El partido bajó la velocidad y en ese intercambio más pausado las francesas se sintieron más cómodas (35-39). Colinas ordenaba otra defensa, esta mixta, con el fin de cambiar el ritmo del partido intentando, desde la defensa, poder correr algo más. Se vivió un momento crítico con cinco puntos por debajo y cierta sensación de inseguridad pero un dos más uno de Montoliu dio oxígeno llegando al descanso sólo dos dos puntos arriba (40-42)

DRAMÁTICO ULTIMO CUARTO

42-48 momento crítico. España en caja y uno alternando con individual. Un triple de Francia situaba  el luminoso en un más preocupante si cabe 44-51 a cinco minutos del final. Esta vez parecía no cumplirse la máxima de todos los partidos del Mundial en el que nuestras jugadoras se imponían por dureza  mental y física en los desenlaces. Cuando peor pintaba las cosas 7 puntos seguidos de Astour devolvía a la vida a España y metía el miedo en el  cuerpo de las francesas. Empate a 51 a cuatro del final. 40” del final, Francia ganaba por un punto. Astour, 27 puntos, había fallado dos tiros libres y las galas anotado un triple. Un contraataque francés distanciaba ponía por delante tras puntos a Francia. El intento de triple no fue posible y el sueño de la  final se esfumaba pero inmediatamente aparecía el reto del bronce.