NAIA FERNÁNDEZ / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Aunque la selección española se ha encontrado un rival más rodado, con más encuentros a sus espaldas y más fino físicamente, España no ha tenido piedad de Turquía y se ha impuesto casi desde el primer instante.

Las pautas trabajadas en los días previos se han podido ver en la pista, y basadA en una excelente defensa, agresivas en líneas de pase, centradas en el balón y posibles ayudas, rebotear y contraataque, España ha abierto hueco con un parcial inicial de 30-15.

Las rotaciones han mantenido el nivel defensivo, seña de identidad de esta selección, y de esta manera se ha llegado al descanso con el encuentro decidido 46-24. Pero la falta de incertidumbre en el resultado no ha hecho bajar los brazos a las españolas que han seguido demostrando tener también las cosas muy claras en ataque, encontrando referencias interiores y acertando en el tiro exterior para seguir incrementando la renta tras el paso por vestuarios. El 66-39 del minuto 30 de partido era muy elocuente.

Pese a la carga física acumulada y de tratarse del primer encuentro de preparación, España ha mantenido una gran intensidad, las jugadoras han hecho un gran esfuerzo y han dejado el luminoso en el 89-54 final.

Al término del encuentro el cuerpo técnico se mostraba satisfecho del trabajo realizado por las suyas, habiendo tomado parte en el choque las 12 jugadoras disponibles.