ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

España no pudo acudir al primer torneo olímpico de la historia, en 1936 en Berlín, a causa del estallido de la Guerra Civil. Y doce años después, en 1948, el presidente de la FEB, el general Querejeta, renunció a acudir a Londres por considerar que el equipo aún no había alcanzado un nivel competitivo internacional mínimo. Pero el sueño sí se pudo cumplir en este año de 1960.

España, que era en aquellos momentos una relativa potencia ya del baloncesto europeo, logró su primer pasaporte olímpico con relativa facilidad, en un torneo de clasificación en el que nada menos que 18 selecciones nacionales optaron a las cinco últimas plazas olímpicas que quedaban por conseguir. Se celebró en la ciudad italiana de Bolonia, donde la Selección derrotó a Taiwan (83-55), Sudán (88-40), Surinam (77-54), Bélgica (81-71) y Canadá (60-49), y perdió sólo un partido, el que le enfrentó a Checoslovaquia (52-64). Con estos resultados, España acabó clasificada en tercera posición final compartiendo el éxito con Checoslovaquia, Yugoslavia, Hungría y Polonia.

España acudió al pre olímpico tras haber jugado un único partido de preparación… Y las dietas designadas a cada jugador para su manutención –un dólar diario- no les llegó a prácticamente nada. Y una vez logrado el pasaporte aún hubo que esperar a que los números de la FEB cuadraran para cubrir el desplazamiento a Roma. A la espera de las instrucciones definitivas de la Federación, acabado el torneo pre olímpico el equipo permaneció unos días más en Bolonia, y para colaborar en la recaudación de los fondos necesarios se desplazó hasta Lugano para jugar un partido de preparación –haciendo lógicamente de ‘sparring’- contra la selección de Estados Unidos. España sabía que no tenía la más mínima opción, pero el resultado final tampoco fue especialmente escandaloso (59-91) teniendo en cuenta que enfrente la Selección tuvo a un rival en el que figuraban varios jugadores que después serían auténticas leyendas en la NBA como Jerry West, Jerry Lucas, Oscar Robertson y Walt Bellamy, un equipo que ya en Roma conquistó la medalla de oro derrotando en la final a la Unión Soviética por un claro 81-57.

En los Juegos, la Selección, dirigida por Eduardo Kucharski, finalizó en decimocuarta posición de un total de 16 participantes. En la fase previa, perdió ante Filipinas (72-74) y Polonia (75-63), venciendo sólo a Uruguay (77-72) en la prórroga.

En las siguientes fases, el equipo español fue derrotado por México (66-80), Francia (78-48) y Puerto Rico (75-65), ganando sólo a Japón (66-64). Esta pese a todo histórica selección española estuvo formada por Joan Martos, Miguel González,  Alfonso Martínez, Jorge Guillén, Agustí Bertomeu, Francisco Buscató, Joaquín Enseñat, Joan Nora, Jesús Codina, Santiago Navarro, José Lluís Cortés y Emiliano Rodríguez. De seleccionadores ejercieron Fernando Font, Jacinto Ardevínez y Octavio Olivé.