INICIACIÓN · FORMACIÓN · ALTO RENDIMIENTO · DIRECCIÓN |
ENTRENAMIENTO DE LA DEFENSA 1-3-1
Joaquín Brizuela Carrión |
Las zonas se leen desde la posición del balón y todas, una vez se realiza el primer pase del ataque y el correspondiente ajuste defensivo, se convierten en una zona 1-3-1. Por ello la importancia de la defensa 1-3-1. Es tal vez la defensa zonal más activa, la que más espacios ocupan y la que más ajustes defensivos permite. Es una defensa que requiere buena técnica defensiva, excelentes condiciones físicas, claro conocimiento táctico, concentración para su correcta ejecución y disciplina en el bloqueo del rebote defensivo. Bien realizada es de una efectividad demostrada, pero si la defensa no es consistente y ante un equipo con conceptos ofensivos adecuados, con paciencia y buenas decisiones de ataque pude ser muy vulnerable. Las dos posiciones especialmente importantes en la defensa 1-3-1 son las del hombre de la cabeza de la defensa (1) y el hombre de atrás (4). El primero debe de ser un defensor técnicamente bueno y rápido, con capacidad táctica defensiva para llevar el balón a donde interesa a la defensa y especial atención a la defensa de las penetraciones. Es el jugador que marca la pauta e intensidad defensiva del equipo. El segundo debe de ser especialmente rápido - realiza el trabajo con desplazamientos más largos -, con buena técnica defensiva y capaz de controlar, hablar, animar y dirigir el esquema defensivo. Debe de tener cualidades físicas y técnicas para defender a jugadores en la posición de poste bajo. El jugador del centro de la defensa (5) será el jugador más grande y lento, con la misión de ocupar líneas de pase e impedir los pases a la posición del poste alto. Debe de ser un gran reboteador. Los jugadores exteriores (3 y 4) serán buenos defensores de las penetraciones y excelentes bloqueadores del rebote, pues en el lado débil de la defensa el rebote tiene especial debilidad. Los movimientos de la defensa son simples y sencillos de aprender y las posibilidades de ajustes son variadas dependiendo de las condiciones de nuestros jugadores y especialmente de las características de los jugadores del equipo contrario. Los desplazamientos de los jugadores en la defensa 1-3-1 son los dibujados en los gráficos 1 y 2. La defensa 1-3-1 es sencilla de trabajar en ruedas de 4 X 3 (Gráficos 3 y 4) y 5 X 4 (Gráficos 5 y 6). Nos permitirá trabajar los movimientos de la defensa y los ajustes que queremos trabajar en inferioridad numérica defensiva, lo que nos dará una notable mejora en la realización de nuestra defensa 1-3-1. En los siguientes gráficos, vemos diversos ajustes de la defensa 1-3-1 a otras configuraciones defensivas en el fin de dar respuesta a distintos planteamientos ofensivos. Gráfico 9, ajuste de la defensa 1-3-1 a formación ofensiva 1-2-2. |