DPTO. COMUNICACIÓN CB AVENIDA

La mejor de las noticias, a estas alturas tan tempraneras, es que "estamos en el punto en que debemos estar tanto a nivel deportivo como de trabajo", explica Íñiguez. "Las jugadoras están haciendo un esfuerzo muy grande, con la sobrecarga lógica que supone el trabajo de estos días y no haber podido entrenar en cinco meses y además ayudando a las nuevas a incorporarse, lo que es un sobreesfuerzo mental. Estoy muy contento con ese trabajo", comenta el entrenador azulón. Precisamente, sobre las nuevas, Roberto explica que "Emese y Nina, que llegaron antes, han hecho un gran trabajo previo y han venido muy bien físicamente. En el caso de Marica, que llegó ayer, ha tenido que estar parada varias semanas y con antibióticos por una infección ajena a la COVID 19 que, evidentemente, la ha dejado débil y tardará un poco más pero no tengo dudas por su actitud que estará bien muy pronto". Y es que, como advierte el preparador, "la cultura del equipo de trabajo y actitud es importante para que las que llegan se sumen, porque las que no lo hagan se tendrán que bajar del bus en la siguiente parada". Seguramente, en situaciones normales, ya hubiéramos visto o vislumbrado algún partido amistoso pero la situación lo impide por lo que "tenemos que hacer ese trabajo entre nosotras para que ese aspecto competitivo se pueda simular poco a poco porque vienen de un proceso muy largo y hay que saber evolucionar". 

Precisamente, la situación que se vive ha servido para el entrenador vitoriano reflexione sobre el mensaje que quiere transmitir como equipo, "tenemos que ser súper positivos y optimistas. Enciendes la tv y te enfadas porque se nota improvisación e incertidumbre. Yo como entrenador puedo elegir frustración y pararme o no pararme y transmitir ese optimismo. Ser ejemplo, hacer las cosas cada día muy bien", comenta. Roberto, además, señala que "soy, seguramente la persona más mayor y experiencia aquí, y es importante que todos noten esa positividad por la situación. Somos ejemplo, debemos ser el ejemplo que a veces no se en el día a día, tenemos esa responsabilidad creando una cultura de trabajo que nos haga sentir orgullosos". En ese sentido, Íñiguez se siente "muy agradecido al club, a sus trabajadores a las instituciones que nos permiten utilizar las instituciones, nos abren cada día el pabellón y nos permiten trabajar, al esfuerzo de mis jugadoras y al de mi staff que está haciendo un trabajo de "chapeau". 

Por último, y ante esa incertidumbre por la situación, el entrenador de Avenida ha querido mandar un mensaje a la afición, "sabemos que no nos pueden ver, que querrían estar con nosotros pero tenemos que decirles que deben estar muy tranquilos porque el trabajo que estamos haciendo es el doble del habitual y tenemos clara la actitud de trabajo que tenemos que hacer porque les representamos a ellos, a nuestro sponsor y a la ciudad y ojalá cuando pueda haber ese reencuentro estén muy orgullosos de nosotras", sentencia