Con la ilusión que genera por sí sola una final pero sin desviarse ni un ápice del que ha venido siendo su planning de trabajo durante toda la temporada, el RETAbet Bilbao Basket viajó en la tarde-noche del viernes a Sevilla donde el equipo de Álex Mumbrú ha ultimado detalles de cara al encuentro más importante de la temporada. Una cita en la que Jaylon Brown será duda hasta la última hora y en la que contarán con el apoyo de decenas de aficionados en las gradas.
PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB
Convertidos en firmes candidatos a todo desde el mismo momento en el que pusieron un pie en la Liga LEB Oro, en el RETAbet Bilbao Basket han sabido convivir con la presión durante los últimos meses para poder alcanzar la final de una Copa Princesa de Asturias que había figurado en todo momento entre sus objetivos para la temporada de retorno a la competición.
Un objetivo conquistado día a día y partido a partido a través de una serie de rutinas de trabajo que, como no podía ser de otro modo, no han variado ni un ápice a lo largo de la semana importante de la temporada para el conjunto bilbaíno.
Así, tras la valiosa victoria cosechada en Huesca en la tarde-noche del pasado sábado y una vez superado el correspondiente viaje de regreso en autobús, Álex Mumbrú y su cuerpo técnico concedieron a su plantilla un día y medio de descanso a sus jugadores con el objetivo de recuperar cuanto antes al equipo del cansancio físico antes de inicia el cambio de chip de cara a la semana más importante de la temporada hasta la fecha.
Con el ambiente copero rodeando en cada sesión la pista de Miribilla para atraer a decenas de aficionados en busca de entradas, el equipo ha sabido abstraerse de todo lo que ha rodeado a la cita copera iniciando los entrenamientos en la tarde-noche del lunes antes de afrontar la mayor carga de trabajo a lo largo de un martes con doble sesión para los hombres de negro. Una jornada que contó con un “media day” sobre la cancha de entrenamiento con el que los jugadores del conjunto vasco dieron por finalizadas sus intervenciones en medios de comunicación con el fin de poder focalizar ya internamente en el partido.
Entrenando en una sola sesión a lo largo del miércoles y el jueves, el equipo ha ido combinando gimnasio, pista y trabajo técnico-táctico con las habituales sesiones de scouting. Un día a día en el que la gripe ha sido una más dentro del vestuario y del que no ha podido participar por lesión un Jaylon Brown que ha arrastrado molestias en el pie. Eso sí, una vez superada la última sesión, el escolta ha sido uno más a la hora de desplazarse con el equipo al Aeropuerto de Sondika para tomar junto al resto de compañeros el avión que les ha trasladado a la capital hispalense.
Así, el equipo tomó tierra en el Aeropuerto de San Pablo a eso de las 20:45h. antes de desplazarse al Hotel Silken Sevilla donde los jugadores de Álex Mumbrú comenzaron a velar armas de cara a la gran final con el último repaso táctico del día sobre lo que les esperará sobre la cancha.
Rutinas, repaso táctico y detalles en las horas previas
Con un horario de juego ligeramente más madrugador que el habitual para ellos, la plantilla del RETAbet Bilbao Basket apenas ha tenido que variar un poco sus costumbres horarias respecto a cualquier otro día de partido ya que el planning de trabajo se ha mantenido firme respecto al de cualquier otra semana.
De este modo, la plantilla ha tenido su toque de diana en torno alas 08:30 am seguido de un desayuno en grupo que ha precedido a su primera y única toma de contacto con los aros del Pabellón de San Pablo antes de la gran final. Una sesión de trabajo dirigida por el técnico ayudante Jorge Elorduy y en la que, por espacio de una hora (10-11h), el equipo ha podido focalizar sobre lo que les esperará en el parqué bético a media tarde.
Con Jaylon Brown perfectamente integrado en el grupo una vez superadas sus molestias, la plantilla ha dado las últimas pinceladas a su plan de partido antes de retirarse de nuevo al hotel de concentración para iniciar una serie de rutinas marcadas por la comida, el tiempo de descanso, una tempranera merienda y un último repaso al vídeo-scouting antes de subirse al autobús a eso de las 16:15h para poner rumbo a la pista de juego.
Allí, en torno a las 16:30h, la plantilla iniciará el tiempo de calentamiento de cara a una batalla para la que contarán con el respaldo de decenas de aficionados en las gradas así como de cientos de seguidores en la distancia a través de la pantalla gigante que se instalará en el Palacio Euskalduna.
Porque a eso de las 18h, cuando los árbitros lancen el balón al aire, no habrá ya punto de retorno…