PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Tras una más que seria primera fase en la que contaron todos sus encuentros por victorias (3/3), las chicas de Madelén Urieta afrontaban en el día de hoy unos octavos de final en los que el equipo nacional ha dado comienzo a un camino que esperan poder finalizar a lo largo del fin de semana en los encuentros que darán opción a la lucha por las medallas.

Algo que podría convertirse muy pronto en realidad tras el magnífico encuentro protagonizado en el día de hoy por un equipo que saltó a la pista pleno de confianza a la hora de poder apuntalas los cimientos del triunfo. La mejor muestra de ello fue un primer cuarto en el que España fue un auténtico todoterreno capaz de hacer de todo y, lo más importante, de hacerlo casi todo bien. Con Aixa Wonne inaugurando el marcador a golpe de triple, el 3-2 inicial fue lo más cerca que pudo ver la Selección de Turquía a una España que, a partir del 8-4 comenzó a volar en el marcador. Los primeros puntos de Natalia Rodríguez, una canasta con rectificado en el aire de Serrat, el acierto exterior de Alba Prieto pero, sobre todo, la alta intensidad defensiva, permitieron a España firmar un parcial de 16-2 en el que prácticamente todas sus jugadoras se sintieron partícipes con el movimiento constante del banquillo por parte de Madelén Uriera (24-6).

Y si su primer cuarto había sido digno de mención, no menos destacable resultó el inicio de un segundo periodo en el que Turquía trato de reaccionar con un triple de salida que no hizo otra cosa más que incrementar el espíritu competitivo de las nuestras. De este modo, dos triples consecutivos a cargo de Alba Prieto y Juana Camilion dispararon a España en el electrónico obligando al seleccionador rival a parar el partido (30-9). Eso sí, el show exterior de la Selección Española no había hecho más que comenzar porque dos nuevas dianas consecutivas con el sello de Natalia Rodríguez lanzaban a una España cuyas rentas eran cada vez mayores (36-9). Turquía estaba obligada a crecer desde la defensa y fue por ello que sus jugadoras entraron muy pronto en bonis ante una España que, esta vez sí, reducía ligeramente su porcentaje de acierto. La lesión de Silvia Serrat a un par de minutos del descanso fue la peor noticia de una primera parte en la que España pareció caminar con firmeza hacia el triunfo (37-13). 

El paso por vestuarios pareció sentarle bien a una Selección de Turquía que recuperaba su caudal anotador habitual con el inicio de una segunda parte en la que volvieron a encontrar aro con vierta fluidez. Eso sí, para entonces España se encontraba ya sumamente cómoda en un encuentro en el que las de Urieta mantuvieron su acierto de cara al aro para no ceder en el electrónico (47-24). Apretaba el rival en defensa pero la magnífica circulación de balón y la generosidad de las jugadoras españolas desembocó en un nuevo paso al frente con el que seguir desequilibrando la balanza (56-31). 

Poca historia tuvieron ya los 10 últimos minutos de un encuentro en el que España comenzó a dosificar fuerzas ante una Selección de Turquía que redujo las diferencias por debajo de la veintena pero que poco más pudo hacer ante el acierto exterior de jugadoras como Andrea Alcántara (72-46). De este modo, España certificaba su pase a unos cuartos de final donde nos mediremos a Francia en la tarde del jueves a la búsqueda de un billete para las semifinales (13:30h).