ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Seguro que han escuchado esta frase: "Los nervios pueden jugarte una mala pasada". Bien, pues el primer cuarto de la U18M en el EuroBasket de Eslovaquia podría utilizarse como el sinónimo perfecto de ese conjunto de palabras. Hasta por 18 puntos llegó a ir perdiendo el equipo de Joaquín Prado, que aunó los dos defectos que te hacen presa fácil para cualquier equipo serbio: nervios y una defensa pobre. Sólo la intensidad bestial de Ehigitor permitió a España no acabar a más de 20 puntos de los serbios en un primer cuarto para olvidar (26-10).

Otro dicho dice que no hay mayor virtud que la de levantarse tras caerse. La U18M era otra en el segundo cuarto. Poco a poco, sin desesperar y con Molins y la hiperactividad de Cuevas, España redujo diferencias. Serbia no encontraba las facilidades para anotar del primer cuarto y se quedó sólo en 13 puntos anotados. Un fantástico parcial que subió la moral del grupo y que, quién sabe, puede resultar clave para el resto del torneo.

A menos de cinco minutos del final del tercer cuarto, un triple genial de Puerto culminaba la remontada. Empate a 46. La intensidad defensiva le sirvió a los de Joaquín Prado para crear un nuevo partido. Una remontada de casta, trabajada y ejecutada por un equipo. Un equipo completo, coral y unido. Lo que hay que exigir a estas categorías de formación. La bandeja de Molins, cerca del final del tercer periodo, daba ventaja a España por primera vez. 55-52, con diez minutos por jugar.

Quedaba rematar. Y los de Prado no fallaron. Apretando en defensa y corriendo la pista, España hacía daño a Serbia. Mucho daño. Tanto como para llegar al +7, a poco más de siete minutos por jugar. Poco después, Puerto con un mate espectacular y un triple, y Ehigitor ponían la puntilla. Enhorabuena chicos, vaya inicio. Sólo deseamos que Ehigitor, que se marchó tocado del tobillo a un minuto del final, se encuentre totalmente recuperado.