PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Gran expectación en la ciudad de Granada de cara al que será el partido más importante en la historia reciente de su baloncesto con una final de Copa LEB Plata preparada al detalle sobre la cancha por su cuerpo técnico durante la semana.

Eso sí, Pablo Pin no ha querido variar ni un ápice la habitual rutina de trabajo sobre la de cualquier otra semana en la que el equipo afronta un partido como local. Con dobles sesiones de trabajo, y los scouting colectivo del rival en la tarde del miércoles, el equipo realizó su última sesión de entrenamiento vendado en una tarde de viernes en la que, como suele ser habitual, su inicio se adelantó a las 16:30 h. prolongándose durante un par de horas y permitiendo por tanto a sus protagonistas descansar en sus domicilios durante las últimas horas de la tarde.

La complicidad del Palacio durante las horas previas:

Ya durante la mañana de partido el equipo nazarí se ha citado en su vestuario minutos antes de las 11 de la mañana para saltar de manera conjunta a la cancha de un Palacio de los Deportes en el que han interactuado con el que será su rival, un HLA Lucentum que finalizaba en esos instantes su sesión de tiro. De este modo, los de Pablo Pin se han vestido por última vez de corto para poder afinar la puntería con una ronda de lanzamientos culminada con una serie de ejercicios específicos interiores/exteriores.  

Acto seguido, la plantilla se ha desplazado a sus respectivos hogares donde descansarán en familia durante las horas previas antes de verse de nuevo en el interior de un vestuario en el que están citados en torno a las 17:30h. En ese momento, Pablo Pin realizará un último repaso al scouting individual entregado a sus jugadores en la tarde previa como preámbulo a una final en la que saltarán a pista en torno a las 18h para iniciar un calentamiento en el que contarán ya con el respaldo de su afición.

De este modo se prepararán para la que esperan que sea su noche más mágica, la noche de la reconquista nazarí…