ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Ricky Rubio, Sergio Llull, Rudy Fernández, Nikola Mirotic y Pau Gasol fue el quinteto elegido por Sergio Scariolo para iniciar la andadura de la Selección Masculina en los Juegos Olímpicos de Río.

Miros Bilan era el protagonista del arranque de partido, con dos anotaciones en las cercanías del aro. España apenas tardaba unos instantes en ajustar la defensa y comenzaba a soltarse en ataque. Los interiores tomaban el mando, pero también aportando desde el exterior: cinco puntos y triples para Pau Gasol y Nikola Mirotic que encabezaban un espectacular 13-0 para España. Ni el tiempo muerto de Petrovic (al que ya se había señalizado una técnica) no frenaba el genial momento de los antiguos compañeros en Chicago, que provocaban que España se fuera por doce puntos (20-8). Scariolo aprovechaba para introducir su primera gran rotación, dando descanso a todos los titulares. El acierto bajaba, pero la intensidad atrás no, aunque Bogdanovic conseguía doblegar en un par de ocasiones a sus pares para colocar el 21-13 al concluir el primer acto.

El alero croata protagonizaba prácticamente un soliloquio en ataque, pero conseguía que Croacia se acercara en el marcador y que Sergio Scariolo solicitara tiempo muerto tras parcial 0-6 (21-17). Felipe Reyes cortaba el arreón balcánico y un triple del cordobés daba una dosis necesaria de aire a un combinado nacional que acumulaba ya cinco faltas personales con más de medio cuarto por jugarse. España superaba el bache volviendo a encontrar con facilidad el camino al aro. Un triple de Sergio Rodríguez, tras un gran movimiento de balón, daba el +11 (33-22). Y otro acierto exterior de Pau daba de nuevo la máxima ventaja (36-24). El MVP del Eurobasket acababa con 16 puntos una primera mitad que finalizaba con dos triples de Bogdanovic y Hezonja (sobre la bocina) que daban mucha vida a Croacia (38-32).

Las tres faltas personales de Ricky Rubio provocaban la entrada de Sergio Rodríguez en el quinteto inicial de la segunda mitad. Croacia también incluía novedades, con Bogdanovic como ‘4’ y Saric ejerciendo de pívot para dar cabida a Hezonja. España salía con una marcha más que su rival y en menos de tres minutos ya se había ido de nuevo por encima de la decena (49-36). Con +13, España no aprovechaba sus opciones en ataque para romper definitivamente el choque, porque en defensa Croacia no lograba sumar, ni de cerca ni desde el perímetro. El marcador apenas se movía en cinco minutos, pero la historia se repetía poco después: Croacia aceleraba en los instantes finales y apretaba el marcador (51-47). Un triple de Mirotic cerraba el tercer cuarto y daba un esperanzador +7 para los de Scariolo.

Croacia no quería volver a dejar escapar a su rival y ponía el ritmo que más le interesaba (56-52). Un triple de Ukic apretaba al máximo el marcador con siete minutos por jugarse y un mate de Babic le daba la ventaja a las croatas por primera vez en el encuentro desde el 0-4 inicial. Los balcánicos habían subido notablemente su intensidad defensiva y el partido entraba en un intercambio de triples entre Sergio Rodríguez, Bogdanovic y Pau Gasol (63-62). España conseguía ir a la línea para sumar necesarios puntos (67-64). Croacia no quería dar su brazo a torcer y encadenaba un 0-5 muy peligroso (67-69). Los ataques de España no entraban y Simon colocaba el partido muy cuesta arriba (67-71). Mirotic abría la puerta de la esperanza, que era cerrada por Dario Saric con un tapón sobre Pau que finiquitaba el encuentro.