MIGUEL PANADÉS

Desde el mismo momento en que quedó clausurada la edición 2015 el corazón del CES2016 empezó a latir. En la cabeza de Miguel Martín, Director del Curso, empezaron a fluir ideas innovadoras, trasmitidas y compartidas con el Director Deportivo de la FEB, Ángel Palmi, impulsor de esa idea de permanente reinvención aplicada a todas y cada una de las parcelas del Área Deportiva. Como todo lo relacionado con el Método, el CES recoge los frutos de la buena gestión realizada y reflejada en los resultados, se impregna de motivación desde el conocimiento, el esfuerzo y la pasión de sus profesionales, y se pone en marcha para afrontar el futuro con todos aquellos aspectos innovadores que puedan mejorar el rendimiento de, en el caso del CES, los casi doscientos alumnos que anualmente cursan la máxima titulación como entrenador del baloncesto español.

“Cada año buscamos una mayor individualización en la formación de los entrenadores con agrupamientos flexibles y con refuerzos constantes. Creamos una asesoría y orientación profesional al alumnado. Enfocamos la enseñanza de habilidades, creamos ejercicios profesionales con conceptos de gamificación en la enseñanza y aplicamos una evaluación continua”. Miguel Martín viaja, como el propio Curso, a caballo entre la ciencia y la esencia, el conocimiento y la pasión. Son catorce días y catorce noches de inmersión baloncestística en los que se provoca que el alumnado reflexione sobre los mensajes que recibe y también sobre sus propios conocimientos para, desde ese punto de partida, encuentrar su método que le acompañará en el futuro.

TUTORES DE LUJO

"Me adentro en el CES como en un volcán de emociones y conocimiento, de solidaridad y exigencia, de sentirme cada segundo del día ENTRENADOR con mayúsculas"… Carlos Colinas, uno de los entrenadores españoles con más medallas obtenidas en selecciones, convertido durante el verano en Tutor del Curso Superior, resume en una frase el sentimiento que envuelve  a una experiencia formativa especial, incomparable.  Aporta sabiduría y la envuelve de experiencia. "La perspectiva formativa que te ofrece, llega el día después, una vez que el CES ya es pasado pero dejando una huella imborrable a tutores y alumnos. Es la máxima expresión del... enseñar aprendiendo"

Respeto y reconocimiento a la esencia, curiosidad y ambición por impregnarse de modernidad, capacidad comunicativa para empatizar con el entorno… una serie de valores fundamentales que el Entrenador Superior debe dominar en su continuo ejercicio formativo. En el Equipo de Tutores la calidad de otro ilustre medallista del baloncesto español como es Evaristo Pérez se convierte en fundamental: “dicen que los adultos aprenden más cuando debaten e interactúan con otros adultos. En el CES se fomenta esta idea con la máxima calidad. Cuando empleas la expresión "un año más", parece que denota rutina. En el CES, un año más, nada es rutina, porque el espíritu que lo mueve es de inconformismo y continuo avance y mejora”.

“Cada año buscamos una mayor individualización en la formación de los entrenadores con agrupamientos flexibles y con refuerzos constantes. Creamos una asesoría y orientación profesional al alumnado”. Miguel Martín

Las diferentes realidades del entrenador español quedas reflejadas también en el Equipo de Tutores encontrando ahí aquellos como Colinas y Varis que han conocido la élite o como Manuel Peña, quien vive la realidad de tantos entrenadores españoles abriéndose camino en el extranjero. En su día número 1 del Curso, convertido ya en una pieza fundamental de ese grupo de formador de formadores aportando esa capacidad de innovación que requiere el actual ejercicio de entrenador profesional. “Ya no vale con actualizarse, hay que adelantarse a los tiempos y eso es el CES. El entrenador del siglo XXI tiene que ser completo en todas las competencias que exige la alta competición, todas ellas sólo se plasman en el curso superior de la FEB”.

“Jugando en casa”, otro indiscutible número 1 como es Santi Pérez, acumulando experiencia a esa ya adquirida en baloncesto de formación y adentrándose en el baloncesto profesional, masculino y femenino, desde esa necesaria aportación de entrenador ayudante que permite sumergirse en los aspectos diferenciales, en los detalles. “El curso es punto de encuentro de 200 personas que han elegido hacer del baloncesto su modo de vida. Una experiencia que que ofrece al alumnado nuevos enfoques y herramientas para un crecimiento de una dimensión única en su carrera”.

El CES, como el propio baloncesto, abre la puerta de las oportunidades a quienes llaman con más fuerza. Este año, entre el equipo de Tutores y con todavía los recuerdos muy recientes de la experiencia como alumno del Curso 2015 estará David Ortega, el número 1 de la edición anterior, becaso por la FEB para conocer la “otra cara de la luna” del CES. “La clave, bajo mi punto de vista, está en ser capaz de dejar el ego en casa, abrir la mente al aprendizaje continuo, empaparse de toda la gente que hay a tu alrededor las 24 horas, solo así serán capaces de entender por qué el CES es tan especial”.