PABLO ROMERO / ÁREA DE COMUNICACIÓN FEB

Un año, siete meses y 20 días separan el 18 de mayo de 2014 en el que Pep Ortega había disputado su último encuentro en la Liga LEB Oro de su retorno a la competición en la tarde del pasado domingo día 10.

Por aquel entonces, el capitán del Ford Burgos conquistaba su segundo ascenso consecutivo culminando un año mágico en el que llegó a coronarse como el mejor ala-pívot de la temporada. Números que bien valieron su salto a la Liga Endesa dando paso a un par de campañas en las que este experimentado jugador interior ha exportado incluso su calidad con sendos contratos en Uruguay y Francia, países en los que militó durante el comienzo de la presente campaña antes de emprender el camino de regreso a la que siempre será su casa.

Y es que, 602 días después de aquel histórico encuentro ante Palencia, el interior vicense volvió a pisar una pista LEB enfundado en la camiseta de un Cafés Candelas Breogán con el que había estampado su firma apenas unas horas antes para ejercer como el gran fichaje del mercado invernal. Un debut con el que protagonizó el despertar de la fuerza de un equipo candidato a todo y que comienza este 2016 con los mejores propósitos posibles en su camino hacia los playoffs por el ascenso.

De la Liga Endesa al Cafés Candelas para retomar la ilusión:

Suele decirse de él que Pep Ortega es uno de esos jugadores que todo técnico quisiera tener en su vestuario. Una condición conocida y valorada de manera positiva tanto por el entrenador lucense Lisardo Gómez como por la dirección deportiva de un equipo que no dudo en incorporarlo a su plantel tan pronto como surgió la oportunidad.

De este modo, el interior catalán puso rumbo su nuevo destino para incorporarse al día a día de un equipo con el que retornar a una competición de la que guardaba un cariño especial: “Cuando surgió la oportunidad de ir a Lugo no me lo pensé mucho… Estábamos hablando de uno de los clubes históricos del baloncesto español, uno de esos equipos que siempre son candidatos a todo dentro de una LEB Oro en la que siempre me he sentido muy cómodo. Es una liga muy exigente en la que nadie te regala nada y, ya desde mi primer año en Gijón, aprendí que debes auto exigirte el máximo para poder disponer de minutos. Eso me ayudó a crecer durante dos temporadas en Girona de las que guardo un recuerdo especial y, sobre todo, a hacerlo bien en esos dos últimos años en Burgos en los que encontramos el mejor premio posible tanto con la conquista de la Copa Príncipe como de los dos ascensos a la Liga Endesa”.

Aunque  ese modesto “hacerlo bien” al que se refiere Pep Ortega fue en realidad su mejor temporada como profesional en un año en el que se coronó como el mejor ala-pívot de la competición, un merecido premio cimentado en varios MVPs y unos números que bien valieron su salto a la Liga Endesa.

Lamentablemente, la esperada oportunidad no terminó de satisfacer a un jugador que decidió pasar página con una aventura intercontinental con la que recuperar la confianza: “Había trabajado mucho para poder cumplir con ese sueño que era el debutar en la Liga Endesa pero las cosas no salieron como a mí me hubiera gustado… Comencé la pretemporada con un buen número de minutos con los que creo que respondí a las exigencias de un equipo como el Estudiantes. Ganamos incluso al Real Madrid en un torneo en Albacete en el que Nacho Matín y yo tuvimos un protagonismo destacado pero, con el paso de las semanas, los jugadores extranjeros se fueron incorporando al equipo lo que, unido a un nuevo fichaje, me dejó sin apenas minutos… Seguí trabajando como desde el primer día pero las puertas poco a poco se fueron cerrando y cuando eso pasa resulta muy difícil reengancharte. Con el paso del tiempo sigo creyendo que pude haber tenido un papel importante si me hubieran dado una mayor confianza y, quizá por eso decidí cambiar este año de aires”.  

De este modo, Uruguay y Francia se convirtieron en sus nuevos destinos antes de regresar a la que siempre será su casa de la mano de un Cafés Candelas Breogán con el que quiere recuperar la ilusión: “Desde el principio la oportunidad de Uruguay  me sedujo porque me ofrecía la posibilidad de cambiar de aires y conocer cómo se vive el baloncesto al otro lado del charco aunque, lamentablemente, las condiciones de los contratos no siempre se cumplen y eso me llevó a regresar. En Francia todo fue diferente, un equipo serio, condiciones serias… pero el contrato era temporal como sustituto de un lesionado y, aunque querían que continuara el número de plazas lo impidió… Eso abrió la puerta de Lugo, depositaron un gran interés y mucha confianza en mí y eso me llevó a venir aquí ya que creo que hay un buen equipo y que hay margen y tiempo suficiente para poder hacer algo importante”.

Un debut para el despertar de la fuerza del Cafés Candelas:

Con un gran recibimiento por parte de la que sera su nueva afición y ataviado con su habitual dorsal cuatro a la espalda, Pep Ortega disputó el pasado domingo sus primeros minutos con la que será su camiseta al menos para lo que resta de temporada.

El balance final, 14 puntos que hicieron de él el jugador más valorado con un equipo con el que sumó minutos de calidad: “Lo cierto es que me he sentido muy cómodo tanto en los primeros entrenamientos como en este primer partido. Tanto el cuerpo técnico como los compañeros me están ayudando a integrarme cuando antes y en ese sentido juega un papel fundamental Dani López con quien coincidí ya en Burgos. Día a día me voy acoplando al equipo  aunque, como es lógico, aún voy a necesitar un tiempo para poder hacerme tanto a los sistemas como a la filosofía de juego de un equipo en el que creo que hay mucho potencial”.

Es precisamente esa creencia la que llevó al ex jugador de Ford Burgos a apostar por un proyecto en el que confía plenamente: “Aunque las cosas no hayan salido del todo bien durante la primera vuelta creo que el equipo puede llegar lejos en esta competición… Ahora mismo nuestro balance nos permite ocupar plazas de playoff y hay un gran grupo humano realmente comprometido con los objetivos del club. Sabemos que quedan muchos partidos por delante y que esto es muy largo, igual que una mala dinámica ha llevado al equipo a perder puestos, tan pronto como podamos enganchar dos o tres triunfos seguidos vamos a poder escalar de nuevo posiciones a la búsqueda del mejor lugar posible de cara al playoff final y ahí… Ahí todos sabemos que todo empieza de nuevo”.

Y será precisamente el tiempo que resta hasta el playoff el mejor aliado posible tanto para el equipo como para un Pep Ortega dispuesto a demostrar en Lugo que tanto él como su nuevo equipo están de vuelta: “Desde el primer minuto aquí he entendido que aquí el baloncesto se vive de una manera especial y es precisamente ese ambiente lo que yo necesito en este momento de mi carrera… La exigencia del Pazo siempre es máxima y eso debe ayudarme a recuperar las sensaciones que perdí el año pasado y a ganar confianza a base de minutos. Que nadie tenga ninguna duda de que voy a dar el máximo en cada partido para ayudar al equipo y para que, entre todos, podamos disfrutar al máximo del tramo final de una temporada en la que será indispensable el poder contar con el apoyo de esta gran afición”.

Estadísticas de la temporada - Pep Ortega:

Partidos jugados: 1
Minutos: 25,29 p.p.
Puntos: 13 p.p.
Rebotes: 9 p.p.
Asistencias: 1 p.p.
Faltas recibidas: 4 p.p.
Valoración: 14 p.p.

Trayectoria deportiva - Pep Ortega:

Cat. Inferiores: Sagrat Cor de Jesus, CB Vic y Unió Manresana
2001/02: Joventut Badalona (Junior)
2002/04: Joventut Badalona (Liga EBA)
2003/05: Gijón Baloncesto (LEB Oro)
2005/06: Akasvayu Vic (LEB 2)
2006/07: Imaje Sabadell Gapsa (LEB Plata)
2007/08: CB Peñas Huesca (LEB Plata)
2008/09: CB Prat Joventut (LEB Plata)
2009/11: CB Sant Josep Girona (LEB Oro)
2011/14: Ford Burgos (LEB Oro)
2014/15: Tuenti Móvil Estudiantes (Liga Endesa)
2014/15: La Bruixa d´Or Manresa (Liga Endesa)
2015/16: Club Trouville (Uruguay)
2015/16: Aix Maurienne Savoie (NM1 - Francia)
2015/16: Cafés Candelas Breogán (LEB Oro)